Padre Edward Broom, OMV (P.Escobita)

Espiritualidad Católica Ignaciana y Mariana

  • LECTURAS DEL DIA
  • ARTICULOS
  • Audios
  • MINI CATECISMO
  • Videos
  • P. Escobita
    • P. Escobita
    • San Pedro Chanel
  • English

May 08 2018

«VITAMINAS» PARA REFORZAR LA FAMILIA

Basta mirar a nuestro alrededor para darnos cuenta de que la familia y el matrimonio están en una grave crisis. El divorcio, la infidelidad, la ruptura y la desintegración familiar – una pandemia – están produciendo efectos devastadores en nuestros niños. Siendo este el caso, ¿qué podemos hacer cada uno de nosotros? Somos discípulos de Cristo y por lo tanto, defensores de la Iglesia doméstica – la familia. Lancemos una estrategia y un esfuerzo decido para salvar a nuestros hijos, a nuestros jóvenes y mediante esto, salvar nuestras familias. El pesimismo, el cinismo y el escepticismo no deben arraigarse de nuestros corazones, más bien permitamos que florezca abundantemente la confianza y la esperanza en Jesús.  Para Dios no hay imposibles, sí podemos salvar nuestras familias.

 Con frecuencia damos por sentado que nuestra familia es unida y así se mantendrá por siempre. Y confiarse en esta actitud es uno de los grandes errores: si la planta no se riega se muere; lo mismo ocurre con las relaciones familiares, cualquiera que sea (esposos, padres e hijos o familia extendida). Si no trabajamos por nuestro hogar, es probable que llegue la frialdad, la falta de comunicación, el aislamiento y por último la separación.

Por eso caen tan bien estas “vitaminas” para reforzar la familia.  Presento, a continuación, diez sugerencias concretas para ayudar a todos a fortalecer y proteger la célula básica de la sociedad – la familia.  

1. ORACION EN FAMILIA.  Una de las principales causas de peleas, lucha, amargura, frialdad y, finalmente de las separaciones es la falta de oración en la familia. Lo que el oxígeno es para los pulmones, la oración es para el alma. Por ello, la oración debe estar en el centro y en el corazón de la vida familiar. Como dijo el sacerdote Patrick Peyton: “La familia que reza unida permanece unida”.

2. EL PADRE COMO CABEZA DE FAMILIA.  Cuando sea posible el padre debe ser la cabeza de la familia y la madre el corazón mismo. Una familia sin cabeza es un Frankestein; una familia sin corazón está muerta. De este modo, el padre debe ser el “líder espiritual” de la familia, el ‘sacerdote’. Esto significa que el padre debe amar a su mujer e hijos. El mejor ejemplo es San José.

3. PERDON Y MISERICORDIA. En muchas familias, la frialdad, la indiferencia y hasta la amargura impregnan todo el tejido familiar. Una de las razones de esto es la falta de perdón. Los miembros de la familia deben ser misericordiosos y perdonar, no sólo siete veces, sino setenta veces siete, es decir, siempre. Por ello, si uno quiere ser perdonado tiene que perdonar desde su corazón.

 4. PALABRAS GANADORAS Y VICTORIOSA: “LO SIENTO”, “TE PERDONO”. El poeta británico Alexander Pope escribió: “Errar es humano, perdonar es divino”. Los miembros de la familia, cultivando una verdadera humildad de corazón, tienen que aprender a decir estas palabras: “Lo siento”. Y otra igualmente importante: “Te perdono”. Estas palabras dichas a menudo y desde la humildad pueden salvar familias.

 5. ACTITUD DE SERVICIO. Todos y cada uno de los miembros de la familia no tienen que esperar ser servidos sino estar siempre listos para servir al resto de sus familiares. Amor y servicio son realmente sinónimos.

6. DAR LAS GRACIAS.  Es una sola palabra, a veces considerada insignificante, pero es una receta para la familia. Se trata de la palabra “gracias”. San Ignacio de Loyola afirmaba que “la esencia del pecado es la ingratitud”. Cultiva en tu familia una “actitud de gratitud”.

7. DESCANSAR DE LOS DISPOSITIVOS MOVILES.  Uno de los momentos claves en la vida familiar tiene que ser el tiempo de la comida o la cena. Normalmente es cuando la familia está junta, comparte experiencias, pasa tiempo junta para así crecer en amor unos con otros. Una imagen cómica que refleja la vida real de muchas familias mostraba al padre viendo la televisión, la madre conectada a su tableta, el hijo jugando a un juego de ordenador y la hija adolescente mandando un mensaje con su teléfono móvil. Por ello, a la hora de las comidas y las cenas, no es más que un pequeño rato, no debería haber teléfonos, ni tabletas, ni radio ni televisión. Cada persona tiene un valor infinito y su alma es inmortal. La televisión y los teléfonos pasarán y desaparecerán.

8. APRENDER A ESCUCHAR. Qué difícil es realmente el arte de escuchar, especialmente a los miembros de la familia. El ritmo frenético y las prisas de ir de una actividad a otra marcan a muchas familias. Y así es difícil escuchar a un miembro de la familia que lo necesita o que simplemente quiere hablar. Y otra cosa, nunca se está lo suficientemente ocupado para no poder escuchar a los hijos.

9. CELEBRACION. Jean Vanier, fundador de las comunidades católicas de El Arca, que trabajan con personas discapacitadas, dijo: “¡Las familias están llamadas a celebrar!”. Los cumpleaños, los aniversarios, fiestas como la Navidad y la Pascua y muchas más, son momentos festivos y exuberantes de celebración en el contexto de la familia. Hay que celebrar al otro en la familia”. Para inyectar una buena dosis de alegría en la familia no hay nada mejor que tener el hábito de celebrar.

10. CONSAGRACION A MARIA.  La Santísima Virgen María es un medio eficaz para llegar al Corazón de Jesús. La preparación y la consagración a la Virgen de toda la familia puede producir abundantes frutos, tales como paz, alegría, amor, felicidad, comprensión, paciencia, pureza, mansedumbre, amabilidad.
El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

May 07 2018

DIEZ FORMAS DE CELEBRAR MAYO, EL MES DE MARIA

La Iglesia ha dedicado un mes, el de octubre, para honrar a María con el rezo del Santo Rosario, el mes de noviembre, para orar por los fieles difuntos; en junio, nos sumergimos en el océano de la misericordia del Sagrado Corazón de Jesús; en julio, alabamos y adoramos la Preciosa Sangre de Jesús, el precio de nuestra salvación, y, mayo es el mes de María.

María es la hija de Dios Padre, la Madre de Dios Hijo y la Esposa Mística del Espíritu Santo; María es la Reina de los ángeles, los santos, y del cielo y la tierra.  San Luis de Montfort la aclama la Reina de todos los corazones y obra maestra de la creación de Dios.

Los santos de todos los tiempos han aclamado las glorias de María con hermosos e incontables formas de expresión de su amor.

Al llegar ahora el mes de mayo, presento diez formas de celebrar mayo, el mes de María, y así manifestar nuestro amor y devoción a la Santísima Virgen María en el mes consagrado a ella. 

Éstas son:

1. CONSAGRACION.  El primer gesto que deberíamos hacer cada mañana es una oración: la oración de consagración a Jesús por medio del Corazón Inmaculado. ¡Arranca bien el día por medio de María”!


Y recuerda la oración que le dirigía Santa Teresa de Calcuta: “María, dame tu corazón, tan hermoso, puro e inmaculado, tan pleno de amor y humildad que yo pueda recibir a Jesús en el Pan de Vida, amarle como tú le amas y servirle en el rostro angustiado de los pobres”.

2. REZAR EL ANGELUS O EL REGINA CAELI. Aunque rezada tradicionalmente a mediodía, recuerda que puede hacerse en cualquier momento de la jornada, estando establecidos sobre todo tres momentos: las 9:00, las 12:00 y las 18:00 horas. “De esta forma santificaremos las horas de la mañana, de la tarde y de la noche por medio de la santa y dulce presencia de María”. Les animo a ello con una frase del Santo Cura de Ars, San Juan María Vianney: “Solo después del Juicio Final podrá María descansar. Desde ahora y hasta entonces, está demasiado ocupada con sus hijos. Servir a la Reina del Cielo es reinar allí, vivir bajo sus órdenes es mejor que gobernar”.

3. CONSAGRAR EL HOGAR Y LA FAMILIA AL CORAZON INMACULADO DE MARIA. Consagren su hogar mediante una novena de nueve días de Rosarios y oraciones que culminarían “con la bendición, por parte de un sacerdote, de la imagen, el hogar y los miembros de la familia. Con esta bendición y consagración, Dios Padre derramará un aluvión de bendiciones sobre y sobre cada miembro de la familia”

4. CONSAGRACION DE UNO MISMO. Hay distintas formas conocidas de consagración personal: la de San Maximiliano Kolbe, la de San Luis María Grignion de Montfort, la más moderna del padre Michael Gaitley. “Esa consagración cambiará radicalmente tu vida entera. Y si ya la has hecho, ¡puedes renovarla cada año para profundizar en el tesoro infinito de amor de Dios que obtenemos por medio de María! María tiene poder sobre nosotros en formas que van más allá de nuestra más rebuscada imaginación”.

5. IMITA A MARIA. Cuando queremos de verdad a alguien, queremos conocerle mejor, seguirle más de cerca e imitar sus buenas cualidades, a las que llamamos virtudes. San Luis María Grignion de Montfort, en su Tratado de la Verdadera Devoción a María, recuerda cuáles son las diez principales virtudes de Nuestra Señora que debemos imitar a modo de utilizarlas luego como “autopista hacia el cielo”. Son éstas: profunda humildad, fe viva, obediencia ciega, Oración incesante, negación  de sí mismo, pureza absoluta, amor ardiente, amabilidad angelical, sabiduría celestial.

Como dice el mismo San Luis María  Grignion de Montfort, “los mayores santos, los más ricos en gracia y virtud, serán quienes recen con mayor frecuencia a la Santísima Virgen, contemplándola como un perfecto modelo a imitar y como una ayuda poderosa”.

6. EN LAS TENTACIONES, ACUDE A MARIA. Nuestra vida es una constante zona de combate, ¡hasta la muerte! No debemos rezar solos contra el demonio, el mundo y la carne. Al revés: en el fragor de la tentación, cuanto todo parezca perdido, ¡pronuncia el Nombre de María, reza el Avemaría! Si lo haces, todos los poderes del infierno quedarán vencidos”.  María es “el general del ejército”. A sus órdenes, el enemigo se desvanece. Como decía San Buenaventura, “los hombres no temen tanto a un poderoso ejército enemigo como temen los poderes del infierno el nombre y la protección de María”.

7. MARIA Y EL AÑO LITURGICO. Debemos conocer la presencia de María en el Cuerpo Místico de Cristo que es la Iglesia a través de su presencia en el año litúrgico, en el que la Virgen tiene un lugar especial. Para ello propone que leamos la carta apostólica Marialis Cultusde Pablo VI, “una obra maestra espiritual, ¡algo que debes leer!”.

    8. LEER SOBRE MARIA.  Una mariología integral y bien fundamentada debe cultivar tanto la doctrina como la devoción, pues así como la doctrina sin devoción resulta árida y seca, la devoción sin doctrina puede degenerar fácilmente en sentimentalismo. Como remedio, y además del texto antes citado, sugiero la carta apostólica de San Juan Pablo II sobre el Rosario, Rosarium Virginis Mariae, donde invita al mundo a “contemplar el rostro de Jesús a través de los ojos y el corazón de María”. “María es la forma más rápida, breve, fácil y eficaz de llegar a Jesús.”

      9. APOSTOLADO MARIANO. Conviértete en un ardiente, ferviente y apasionado Apóstol de María como San Maximiliano Kolbe. Uno de cuyos métodos para difundir la devoción a la Inmaculada era la Medalla Milagrosa, que él regalaba a todos los que podía, a la menor ocasión que se le presentaba, como si fuesen lo que él denominaba “balas espirituales” para ese combate. Explicarla es toda una catequesis sobre la Inmaculada, y si se llama “Milagrosa” “es por la cantidad de milagros que le han atribuido quienes la han usado con fe, amor y confianza en la intercesión de María. ¿Por qué no ser un apóstol de María siguiendo los pasos de Kolbe? El santo polaco aseguraba que “solo a la Inmaculada le ha sido prometida por Dios la victoria sobre Satanás. Ella busca almas que se le consagren enteramente, y que en sus manos se conviertan en poderosos instrumentos para la derrota de Satanás y la difusión del Reino de Dios”.

      10. EL SANTO ROSARIO.​​​​​​​ Las seis veces (los días 13 de mayo a octubre de 1917) que la Virgen se apareció en Fátima a Lucía, Jacinta y Francisco les insistió en el rezo del Rosario. En la carta citada, San Juan Pablo II le atribuye al Rosario la capacidad de salvar la familia y la paz mundial. El padre Patrick Peyton consagró la frase: “Familia que reza unida, permanece unida”, y esta otra, menos conocida: “Un mundo que reza es un mundo en paz”. ¿Por qué no obedecer a la Madre de Dios, a las peticiones de Nuestra Señora de Fátima? Si lo hacemos, la familia se salvará y alcanzaremos la paz que el corazón humano tanto anhela.

      El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

      Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

      Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

      Abr 09 2018

      EL ABC DE LA DIVINA MISERICORDIA


      Jesús le dijo a Santa Faustina que Su atributo más grande era Su Divina Misericordia.

       San Juan Pablo II reveló que el día más feliz de su vida fue el Domingo de la Divina Misericordia del año 2000. ¿La razón? Hubo tres razones para este desborde de alegría.

      –PRIMERO, porque era el Domingo de la Misericordia.
      –SEGUNDO, porque él canonizó a su primer santo en el nuevo milenio: Santa Faustina Kowalska.
      –TERCERO, porque el Pontífice anunció oficialmente que ¡el Segundo Domingo después de Pascua sería el Domingo de la Divina Misericordia! Su alegría no tenía límites.

      En este artículo nos gustaría presentar un acrónimo del abecedario de la Divina Misericordia con el cual intentaremos dar una idea separada de cómo entender y vivir la Divina Misericordia con cada letra del alfabeto (inglés).

      Sin embargo, permítannos comenzar citando un texto de Divina Misericordia en mi alma de Santa Faustina Kowalska.

      Éstas son las apasionadas palabras de Jesús que desea que toda la humanidad ame la misericordia y CONFÍE en Él completamente:

       

      “Que las almas que tienden a la perfección adoren especialmente Mi misericordia, porque la abundancia de gracias que les concedo proviene de Mi misericordia.

      Deseo que estas almas se distingan por una confianza sin límites en Mi misericordia. Yo Mismo Me ocupo de la santificación de estas almas, les daré todo lo que sea necesario para su santidad.

      Las gracias de Mi misericordia se toman con un solo recipiente y éste es la confianza. Cuanto más confíe un alma, tanto más recibirá. Las almas que confían sin límites son Mi gran consuelo, porque en tales almas vierto todos los tesoros de Mis gracias.

      Me alegro de que pidan mucho, porque Mi deseo es dar mucho, muchísimo. Me pongo triste, en cambio, si las almas piden poco, estrechan sus corazones.” (Diario N° 1578)


      A – ¡ASIDUAMENTE LISTOS PARA PERDONAR!  Dios es lento para la cólera y pronto para la piedad, y ¡siempre está listo para perdonar! ¡Así debemos ser nosotros!

      B – (Be) SER MISERICORDIOSO.  Sé misericordioso como tu Padre que está en los cielos es misericordioso. La misericordia es una calle de dos vías y no un callejón sin salida. ¡Dios nos perdonará y derramará Su misericordia sobre nosotros sólo si nosotros nos mostramos misericordiosos hacia los demás!

      C – CARIDAD Y MISERICORDIA SON PRACTICAMENTE SINONIMOS. Caridad es amor sobrenatural, el amor que Dios tiene por nosotros y el amor que nosotros deberíamos tener por Dios. La misericordia de Dios es el abundante de Dios que perdona a los pecadores.

      D – (Do) “HAZ A LOS DEMAS LO QUE QUIERAS QUE TE HAGAN A TI.” Ésta es la Regla de Oro. ¡Aplícala a la misericordia!

      E – EUCARISTIA Y MISERICORDIA. Para el perdón de nuestros pecados, necesitamos las gracias abundantes de Dios y ellas vienen hacia nosotros a través de la Eucaristía, el Pan de la Vida…

      F – (Forgive) PERDONA. Jesús dijo: «Padre perdónales que no saben lo que hacen». Perdona inmediatamente, ¡si no el corazón se endurecerá y se insensibilizará ante el ofensor!

      G – (Give) ¡DA! “!Dad hasta que os duela!” Estas palabras de Santa Madre Teresa de Calcuta se refieren a la misericordia. No siempre es fácil, pero sí posible con la gracia de Dios.

      H – (hallucination) ¡Ilusión. Esperanza por el cielo! Dios tiene Su recompensa celestial aguardando por aquellos que han pedido Su misericordia y que han dado libremente Su misericordia. «El buen ladrón murió como ladrón porque robó el cielo». (Fulton Sheen)

      I – INSTANTANEO PERDON. Jesús perdonó en el acto al buen ladrón porque él confió totalmente en el Corazón misericordioso del Salvador. ¿Y tú? Dios puede perdonar pecadores en un abrir y cerrar de ojos si su arrepentimiento y confianza es total.

      J – JESUS ES CENTRO. Jesús es el centro, la esencia, totalidad y océano de misericordia en Su misma Persona. ¡Jesús en vos confío!

      K – KYRIE ELEISON. Conoce Su misericordia en la teoría, pero también en la práctica. Tradúcela a tu vida. Dios nos llama a estudiar y conocer su divina misericordia. ¿Por qué no leer el “Diario de Misericordia en mi alma” de Santa Faustina Kowalska?

      L – (Love) AMOR. San Agustín dijo: “Ama a Dios y haz lo que quieras”. La misericordia y el amor son hermanas gemelas. ¿Por qué no leer el magnífico himno al amor de San Pablo – ¡1 Corintios 13!

      M – MISERICORDIA. En latín, esta palabra está compuesta de dos partes: “miseria” – el pecado es miseria moral; y “cordia” – que significa ¡corazón! El corazón amoroso de Dios está siempre listo y dispuesto a aceptar nuestra miseria como el Padre y el Hijo Pródigo. Lee y medita la Parábola del Hijo Pródigo: Lucas 15;11-32.

      N – ¡NO A LA VENGANZA! No deberíamos buscar venganza nunca, sino perdonar y ser misericordiosos. Deja los juicios a Jesús que vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos (Credo).O – (Overflowing) DESBORDANTE AMABILIDAD Y MISERICORDIA. Jesús le dijo a Santa Faustina que Su misericordia es un abismo infinito, como un inmenso océano. ¡Incluso el más alto en rango de los ángeles no puede entender o comprender las profundidades de la misericordia del Corazón de Jesús!

      P – ¡PAZ! Uno de los frutos extraodinarios de vivir la misericordia hasta lo más profundo es la paz interior en la mente, el alma y el corazón. ¡Los que buscan la paz son misericordiosos de corazón!

      Q – (Queen) LA REINA. La Reina de la misericordia es María Santísima. En el Dios te Salve decimos:»Dios te salve Reina, Madre de Misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra…»

      R – ¡REFUGIO! En todo momento y en todo lugar debemos buscar refugio en los corazones misericordiosos de Jesús y María. Sagrado Corazón de Jesús en vos confío. Sagrado Corazón de María se la salvación del alma mía.

      S – ¡SALVACION! Nuestra salvación vendrá, más que nada en este mundo, de confiar en la infinita misericordia del Corazón de Jesús. Oremos:“Señor misericordioso, no seas mi juez sino mi Salvador misericordioso. Amén”.

      T – (Trust) CONFIANZA. Jesús dijo a Santa Faustina que el peor de los pecados es la falta de fe en Él. Mientras más grande el pecador, más tiene derecho a la misericordia de Dios. Jesús dijo a Santa Faustina que los grandes pecadores del mundo pueden ser grandes santos, ¡si ellos simplemente confían! Oremos todos los días de nuestras vidas o incluso en nuestro lecho de muerte: ¡Jesús yo confío en ti!

      U – UNIVERSAL EN SU MISERICORDIA. La palabra “Católico” en realidad significa universal. La misericordia del Sagrado Corazón de Jesús no se limita al tiempo, espacio o circunstancia, sino que está abierta a todos, si tan sólo – ¡Jesús en vos confiamos!

      V – ¡VICTORIAS! Si hemos entendido la misericordia, amamos la misericordia y hemos vivido el mensaje y doctrina de la misericordia al máximo, entonces ¡seremos victoriosos! Habremos vencido y el bien merecido premio de la vida eterna nos aguardará. ¡Viva Cristo el Rey de la Misericordia!

      W – (Washed) LAVADO. La confesión es el Sacramento de la infinita misericordia de Dios. Cada vez que he recurrido a esta fuente infinita de misericordia que es la Preciosa Sangre de Jesús, entonces ¡estoy inmerso en Su Infinita misericordia en el Sacramento por excelencia de la Misericordia!

      X – ¡X! Jesús le dijo a Santa Faustina que hiciera una «X» y tachara sus pecados por completo por medio de la misericordia de Dios para comenzar una nueva vida. Con la confesión iniciamos una nueva vida; somos nuevas creaturas. En el Domingo de la Misericordia, habiendo confesado nuestros pecados y recibiendo la Sagrada Comunión, nuestra alma se torna tan blanca como la nieve; es casi como somos bautizados por segunda vez. Volvemos a la inocencia bautismal. ¡Alabado sea Dios en los cielos!

      Y – ¡YO DIGO SI! Decir SÍ a Dios como María en la Anunciación. Nadie experimentó el amor y la gracia mejor que la Santísima Virgen María. En el Magníficat, himno de alabanza, ella exalta la misericordia de Dios: «Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios mi Salvador… u misericordia llega a sus fieles de generación en generación».


      Z – ZAMBULLIRNOS EN LA MISERICORDIA. Sé misericordioso como tu Padre que está en los cielos es misericordioso. La misericordia es una calle de dos vías y no un callejón sin salida. ¡Dios nos perdonará y derramará Su misericordia sobre nosotros sólo si nosotros nos mostramos misericordiosos hacia los demás! ¡Que nuestra Señora de la misericordia ruegue por nosotros!


      El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

      Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

      Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

      Abr 09 2018

      ENAMORATE DE LA DIVINA MISERICORDIA

      Seamos apóstoles vivientes de la gran misericordia de Dios, él se regocija en los que confían en su misericordia…

      ¡La misericordia de Dios es su mayor atributo! Santa Faustina, San Juan Pablo II y el angélico doctor Santo Tomás de Aquino ¡están de acuerdo por unanimidad! La misericordia no es otra cosa que el amor de Dios que perdona al pecador.

      Dios anhela inundar el mundo entero con su infinita misericordia; es como un fuego ardiente consumiéndolo y que Él desea tan ardientemente otorgarlo a todos, pero son demasiado pocos los que saben de su misericordia y aún menos los que desean recibir este obsequio.

      Quizás nosotros estemos entre aquellos que entienden la misericordia infinita de Dios, la reciben y también tratar de promoverla. ¡Seamos apóstoles vivientes de la gran misericordia de Dios, él se regocija en los que confían en su misericordia y además lo promueven a todo el mundo!

      Dios escogió a Santa Faustina Kowalska para que fuese su embajadora y promotora ardiente de la más sublime de las virtudes de Dios, la Divina Misericordia, dando difusión a través del clásico escrito: “El diario de la misericordia en mi alma.”

      ¿Cómo entonces podemos comprender, abrazar, vivir y promover la infinita Misericordia de Dios en nuestras vidas y en las circunstancias concretas en las que estamos viviendo en este momento?

      A continuación, ofrecemos quince maneras de enamorarse de la Divina Misericordia. Para que podamos ser heraldos y apóstoles de la Divina Misericordia. Para que un día en el cielo sea alabada la Misericordia de Dios por toda la eternidad.

      1. LEER EL “DIARIO DE LA DIVINA MISERICORDIA EN MI ALMA” DE SANTA FAUSTINA. Todos debemos tener esta obra maestra, que es un clásico espiritual y tener el hábito de leerlo, meditarlo, contemplarlo, orar, amar y vivir este mensaje sencillo pero sublime que Dios ha dado al mundo moderno. Lo que el mundo necesita hoy más que nunca es entender y vivir el Evangelio de la Misericordia. Cada día entremos en el hábito de la lectura durante cinco minutos o, al menos, uno de los 1820 párrafos de este ¡regalo de Dios! ¡Empieza hoy! Una sugerencia más: trata de poner en práctica lo que estás leyendo.

      2. ENTRONIZA LA IMAGEN Y HONRALO. Compra una bella imagen de la misericordia divina y entronízalo en tu casa en un lugar honorable. Recuerda bendecir la imagen por medio de un sacerdote católico. Honra la imagen con frecuencia. Muestra a los que entran en tu casa que Jesús, el Rey de la Misericordia es el rey de esta casa, el rey de todos los que entran en esta casa. ¡Dios promete bendiciones muy especiales a los que honran esta imagen a través del tiempo y las bendiciones alcanzan toda la eternidad! Promueve la entronización de las imágenes de la Divina Misericordia en otras casas. ¡Enseña a los niños y a los jóvenes acerca de la infinita misericordia de Dios! Esto traerá una gran alegría al Sagrado Corazón de Jesús.

      3. REZA LA CORONILLA DE LA DIVINA MISERICORDIA. Fórmate el hábito de rezar la Coronilla de la Divina misericordia tan a menudo como sea posible; sólo se tarda unos cinco minutos. Se puede rezar en la iglesia, en casa, en el automóvil, en la fila del supermercado, en cualquier momento y en cualquier lugar. Jesús exhortó a Santa Faustina que orara frecuentemente. Esta oración aplaca la ira de Dios y tiene el poder de convertir el más duro de los pecadores. “A través de los méritos de tu dolorosa pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero.”

      4. LA HORA DE LA MISERICORDIA. Trata de ser cada vez más consciente de la hora de la misericordia; esto es a las 3:00 pm todos los días. Jesús le pidió a Santa Faustina que rezara el Vía Crucis a esta hora, o que visitara el Santísimo Sacramento del altar, o al menos se uniera a la pasión, agonía y muerte de Jesús en la cruz en la hora de la misericordia, que fue la hora y el minuto en que Jesús murió en la cruz por la salvación de nuestras almas. En tu caso, al menos trata de recordar la hora de la misericordia y de unirte tú mismo o misma con la última agonía y muerte de Jesús en la cruz y luego pide al Padre cualquier gracia que desees. Para Dios es especialmente agradable que se le pida la conversión de los pecadores en el lecho de muerte. En este momento Dios Padre está contemplando la agonía, el sufrimiento y la muerte de su amado Hijo Jesús, ¡y justo ahí no nos puede ni quiere negar nada! A menudo pediré al Señor Jesús por medio de su más amarga pasión, la conversión y salvación de todos los que morirán por la tarde y por la noche. Dios ama la salvación de las almas y así debemos amarla también.

      5. NOVENA DE LA DIVINA MISERICORDIA. Es muy agradable a Dios que hagamos la novena de la Divina Misericordia. Esta novena comienza el Viernes Santo y tiene una duración de nueve días hasta la Solemnidad de la Divina Misericordia, que es el domingo después del Domingo de Pascua. Cada día hay una intención de oración especial que Dios inspiró a Santa Faustina y que ella escribió en el diario. Las intenciones son muy inspiradoras ¡y son un modelo para la oración de petición! Esta novena también se puede rezar en cualquier momento durante el transcurso del año, pero sobre todo desde el Viernes Santo hasta el Domingo de la Misericordia.

      6. DOMINGO DE LA MISERICORDIA. Vivir el domingo de la Misericordia lo más intensamente posible. Como se dijo anteriormente es el domingo siguiente al domingo de Pascua y se instituyó como fiesta litúrgica formal en el año 2000 por san Juan Pablo II (que en aquella ocasión cayó el 30 de abril, domingo después de Pascua). Ese mismo día, el Santo Padre, el Papa Juan Pablo II canonizó a Santa Faustina Kowalska; ella fue la primera santa canonizada en el nuevo milenio. El gran Papa de la Divina Misericordia, el Papa Juan Pablo II declaró con emoción sincera que este era el día más feliz de su vida. Se sentía a sí mismo como un verdadero apóstol de la Divina Misericordia al empezar el nuevo milenio instituyendo esta solemnidad y canonizando a la santa que Dios usó como un instrumento clave para traer al mundo esta gracia extraordinaria.

      7. OBTENCION DE LA PROMESA DE LA DIVINA MISERICORDIA. Entre las más extraordinarias promesas de la Divina Misericordia es la que podemos recibir el domingo de la Misericordia. ¡Eso es! Si hacemos una buena confesión sacramental en el momento de la semana de Pascua o incluso Cuaresma, y luego recibimos la Santa Comunión el domingo de la Misericordia con gran fe, devoción y amor, entonces todos nuestros pecados del pasado son totalmente perdonados. Pero no sólo nuestros pecados son perdonados, sino también la pena temporal por estos pecados queda totalmente perdonada. “Si vuestros pecados fueren rojo escarlata, los haré tan blancos como la nieve.” (Is. 1:18) En concreto, esto significa que tenemos nuestra inocencia bautismal restaurada en nuestras almas. Si nos morimos después de recibir este privilegio entonces nos vamos directamente al cielo. ¡Esta es una gracia extraordinaria que siempre deberíamos recibir cada año el domingo de la Misericordia! Difundamos la Buena Nueva a todo el mundo.

      8. BUENAS CONFESIONES. Otra manera concreta en la que podemos vivir la misericordia es asistir frecuentemente al Sacramento de la Confesión, también conocido como el Sacramento de la misericordia infinita de Dios. Cada vez que hacemos una buena confesión sacramental, el Padre amante de la parábola del hijo pródigo nos abraza con el amor más tierno y hay alegría y fiesta en el cielo entre los ángeles y los santos (Lucas 15). Haz el hábito de ir al menos una vez al mes a recibir el Sacramento de la misericordia de Dios y trae a toda tu familia. Ser apóstol del Sacramento de la Confesión es muy agradable a Dios. ¡Una buena confesión sacramental nos inunda con un océano de la misericordia de Dios!

      9. SÉ MISERICORDIOSO ASI COMO TU PADRE CELESTIAL ES MISERICORDIOSO. La misericordia de hecho es una calle de dos vías, y no de un solo sentido. Si queremos recibir la misericordia de Dios en nuestras vidas, entonces debemos estar constantemente listos y dispuestos a ser misericordiosos con aquellos que nos han herido y ofendido. La oración más famosa del mundo es el Padre Nuestro, en el que se reza: “Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden…” Estas palabras del Señor son inequívocamente claras: si queremos que Dios nos perdone, entonces debemos necesariamente estar dispuestos a perdonar a los demás, ¡siempre y en todo momento! Recuerda el mandato del Corazón de Jesús: “Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso.” ¡Tomemos en serio estas palabras del corazón.

      10. ACTOS DE MISERICORDIA DIAROS. Jesús también dijo a Santa Faustina que Él desea que practiquemos al menos un acto de misericordia todos los días. Hay tres maneras diferentes en que esto se puede llevar a cabo:

      —PALABRAS: decir una o más palabras amables a alguien; esto puede levantar su espíritu cansado y afligido;
      —HECHOS: llevar a cabo algún acto concreto de misericordia; Busca las 7 obras de misericordia corporales y las 7 espirituales y tratar de hacer por lo menos una de ellas al día;
      —ORACIONES. Ora por alguna persona, eso es agradable a Dios, y acompaña la oración con un acto de piedad hacia alguien. Por cierto, Jesús nos recuerda que todo lo que hacemos a los demás realmente se lo hacemos a Él. (Mt. 25: 31-46)

      11. LA CORONILLA DURANTE LA AGONIA. Es de mayor importancia con respecto a la salvación de las almas, el rezar la Coronilla de la Divina misericordia, sobre todo cuando la persona se encuentra en sus últimas horas, los últimos momentos, su última agonía. Son momentos de gran prueba, tribulación y en ocasiones de tentación. Jesús prometió que si alguien está rezando esta coronilla cuando la persona se está muriendo entonces el alma se salvará. Por lo tanto, hagamos lo que San Pablo nos recuerda, completar lo que le falta a la pasión de Cristo, esforzándonos por salvar almas rezando la coronilla en la cabecera de los moribundos.

      12. DISTRIBUYE ESTAMPITAS DE LA DIVINA MISERICORDIA. Otra práctica sencilla pero que puede ser muy agradable a los ojos de Dios es adquirir un paquete de tarjetas con la imagen de la Divina Misericordia (¿qué tal unas mil?) Y simplemente distribuirlas en todos lados, por ejemplo, en reuniones de oración, funerales, bodas, misas de la primera comunión, en el parque e incluso en la tienda de comestibles para darlas a conocer en abundancia y así ¡Dios te recompensará en abundancia!

      13. LA EUCARISTIA Y LA DIVINA MISERICORDIA.  Entra en el hábito de visitar el Santísimo Sacramento. De hecho, cada vez que estamos orando de rodillas frente al Santísimo Sacramento estamos en la presencia del Sacratísimo Corazón de Jesús y en contacto con su Divina Misericordia. ¡Que los rayos de Su Divina Presencia transformen nuestro corazón en uno lleno de los más nobles sentimientos de piedad!

      14.COMUNION Y MISERICORDIA. El acto más grande es el de asistir al Santo Sacrificio de la Misa y recibir la Santa Comunión. La verdad es que cada Santa Comunión contiene el Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo. Eso significa que en realidad recibimos su Sacratísimo Corazón; en un sentido real, tenemos un trasplante espiritual de corazón de cada vez que recibimos la Santa Comunión con fe, devoción y amor.

      15.NUESTRA SENORA DE LA MISERICORDIA. Estaríamos incompletos si no invitamos a la Virgen a que nos ayude a comprender, amar y vivir el mensaje de la Divina Misericordia. San Alfonso afirma que nunca debemos tener el temor de acercarnos a la Virgen. En Dios hay dos atributos opuestos: misericordia y justicia. Sin embargo, en la Virgen hay misericordia pura. Al final de cada Rosario rezamos el Salve… “Salve, Madre de Misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra…” Que la Virgen alcance para nosotros un entendimiento más y más profundo de la misericordia infinita de Dios por las almas, la misericordia infinita de Dios para nuestra familia, la misericordia infinita de Dios ¡para ti y para mí!

      CONCLUSION: Que la oración del salmista sea la oración que desborde nuestros corazones y nuestra vida ahora y siempre: “. Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia” Alabemos la Misericordia de Dios hoy, aquí, en el tiempo, de manera que en el cielo alabemos su Misericordia siempre, para toda la eternidad.

      El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

      Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

      Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

      Abr 03 2018

      CINCO VÍAS PARA CONQUISTAR LA PACIENCIA

      “La paciencia es la más heroica de las virtudes, precisamente porque carece de toda apariencia de heroísmo”. La paciencia es una forma de enfrentar al mundo desde la esperanza de la vida eterna; es una de las formas más elevadas de darle su lugar al prójimo y confiar en Dios.

      Ninguno de nosotros podría decir que domina perfectamente la virtud de la paciencia. Cuando pensamos que hemos conquistado una victoria mayúscula en la adquisición de paciencia de pronto, tomados por sorpresa, volvemos a explotar y nuestra ilusión se convierte en humo.

      La paciencia es importante para la salvación de nuestras almas, y siempre está poniéndose a prueba, incluso con Dios mismo, que nos aparece distante, que no escucha nuestras oraciones o se nos hace que es indiferente a nuestras súplicas.

      Por ello, ofrezco cinco vías concretas para que podamos alcanzar la paciencia en nuestra vida de fe:

      1. REZAR. San Ignacio insiste en que debemos pedir la gracia. San Agustín, humildemente, nos recuerda que todos somos mendigos ante Dios. Dios está dispuesto a dar si perseveramos en pedir. Recordemos a la viuda que derrotó al frío corazón del juez por el simple hecho de mantenerse pidiéndole su ayuda. Como en Mateo (7:7), hay que tener presente que si pedimos recibiremos; si buscamos, encontraremos y si tocamos a la puerta, se nos abrirá.
      2. LA VIDA DE JESUS. Él el camino, la verdad y la vida y nadie va al Padre si no es a través de Él. Hay un refrán muy popular que señala lo siguiente: “Dime con quién andas y te diré quién eres”. Si ocupamos tiempo meditando sobre el Evangelio, las palabras, los gestos y las acciones de Jesús, será como encender una luz en nosotros. Vamos a empezar a imitar más y más a Jesús, sobre todo en la virtud de la paciencia.
      3. LA PASION DE CRISTO. Muchos santos han tenido un magnetismo particular en la Pasión, llevando a sus corazones la meditación sobre la más grande historia de amor del mundo. “No hay amor más grande que aquel de quien da la vida por sus amigos”. Una meditación constante de la Pasión, el sufrimiento, la crucifixión y la muerte de Jesús, puede llegar a ser una fuente infinita de bendiciones y la clave para abrir la puerta de la paciencia a los corazones más endurecidos.
      4. JUICIOS Y OPORTUNIDADES. Cuando los juicios descienden sobre nosotros como un torrencial diluvio, llevemos a la mente algún elemento de la Pasión de Cristo, ya sea de los Evangelios o de obras como las de Anne Catherine Emmerick. El juicio, entonces, será visto en una más universal y supra natural prospectiva. El juicio sobre mí es doloroso, pero comparado a Jesucristo es una bagatela. También es que sufro por mis pecados y por mi pasado pecaminoso, pero Jesús sufrió siendo la epítome de la inocencia.
      5. MARIA, NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES. El filme de Mel Gibson pone a María a lo largo de todo el curso de la Pasión de Cristo. Solamente detrás del sufrimiento de su hijo está el de su madre. Lo acompañó al Calvario y estuvo de pie ante la cruz, haciendo de la paciencia una virtud heroica. De hecho, practicó la paciencia toda su vida: en la huida a Egipto, buscando tres días a su hijo, perdiendo a su bien amado esposo, al pie de la cruz de su Hijo… Cuando nuestra paciencia sea puesta a prueba, volvamos los ojos, la mente y el corazón a Nuestra Señora, y ella nos hará conquistar la virtud heroica que necesitamos.

      Ciertamente, como alguna vez dijo Giacomo Leopardi (1798-1837), “La paciencia es la más heroica de las virtudes, precisamente porque carece de toda apariencia de heroísmo”. Y de eso se trata el seguimiento a Jesús: de ir a contracorriente de la apariencia.

      El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

      Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

      Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

      • « Previous Page
      • 1
      • …
      • 29
      • 30
      • 31
      • 32
      • 33
      • …
      • 104
      • Next Page »

      Entradas recientes

      • EL CONCLAVE
      • EL VICARIO DE CRISTO
      • EL ARTE DEL DEBATE
      • DOMINGO DE LA DIVINA MISERICORDIA
      • LA MUERTE DE UN PAPA
      • PESCADOR DE HOMBRES
      • DIRECCION ESPIRITUAL
      • 5 FINES DE LA MISA
      • 5 M´s
      • MODALES EN MISA

      © Copyright 2016 Oblates of the Virgin Mary · All Rights Reserved