
CONTEMPLACION DE LA PASION DE CRISTO CON LOS OJOS Y EL CORAZON DE MARIA
Después de Jesús, no hay corazón que nos ame más que el Corazón Inmaculado de María. Y, después de Jesús, no hay, ni habrá jamás, criatura que hay padecido más grande dolor o sufrimiento que María la madre de Dios.
Meditación
Lucas 22 y Lucas 23
