Padre Edward Broom, OMV (P.Escobita)

Espiritualidad Católica Ignaciana y Mariana

  • LECTURAS DEL DIA
  • ARTICULOS
  • Audios
  • MINI CATECISMO
  • Videos
  • P. Escobita
    • P. Escobita
    • San Pedro Chanel
  • English

Sep 11 2013

COMBATIR PARA ALCANZAR PUREZA DE CORAZON


San Agustín, santa María Magdalena, santa Margarita de Cortona (conocida como la »segunda Magdalena») tenían esto en común — eran esclavos a los deseos de la carne y la sexualidad.

La esclavitud era tan abrumadora, que la oración de Agustín era: »Señor concédeme la virtud de la pureza, ¡pero hoy no!»

No hace falta ser genio o saber latín para saber que la adicción más grande en el mundo moderno es alguna forma de aberración sexual.  La fornicación, la masturbación, la pornografía, el adulterio, el divorcio, la legalización desenfrenada a la práctica de la homosexualidad, se ha expandido de forma imponente, la sociedad se ha acostumbrado y vuelto insensible a ello, da lo mismo lo bueno que lo malo.

LA PALABRA DE DIOS Y LOS MANDAMIENTOS.  Aunque la sociedad moderna promueva esta libertad falsa, el libertinaje, la Palabra de Dios y los diez Mandamientos siguen siendo viables y lo serán hasta el fin del los tiempos.

Dos de los diez mandamientos tratan explícitamente la importante virtud de pureza:  el sexto y noveno mandamiento.  El sexto mandamiento de la ley de Dios es:  »No cometerás adulterio.»  Y el noveno »No desearás la mujer de otro.»

En el blog anterior (Combatir para alcanzar pureza de corazón -1.ª PARTE) delineamos cinco practicas concretas para combatir y alcanzar la virtud de la pureza.  En este escrito, se presentarán cinco estrategias espirituales.

1.  LA SANTA EUCARISTÍA.  Indiscutiblemente, el medio más eficaz para alcanzar cualquier virtud, y en particular la virtud de la pureza, es por medio de la recepción frecuente, fervorosa y llena de fe, del más grande Sacramento, la Santa Eucaristía.  La Eucaristía es verdaderamente y sustancialmente el Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo, nuestro Señor y Salvador.  Cuando recibimos la Santa Eucaristía, el Cuerpo y la Preciosa Sangre de Jesús circulan por nuestras venas directamente a nuestro corazón.  En verdad, con cada Santa Comunión, recibimos un »transplante de corazón».  Jesús, nos da voluntariamente su sacratísimo Corazón para reemplazar el nuestro.  ¡Se realiza un transplante de corazón!  San Juan Bosco celosamente animaba a los jóvenes del oratorio a que comulgaran con la mayor frecuencia posible, y por supuesto, con la debida disposición y recogimiento.  La Santa Eucaristía apaga la concupiscencia y el fuego lujurioso de las pasiones!

2.  EL TRABAJO.  »El ocio es el taller del diablo.»  Si no tenemos nada que hacer, el diablo nos dará mucho qué hacer, especialmente cosas que tienen que ver con la impureza.  San Buenaventura decia: »Cuando estamos ocupados con nuestro trabajo, sólo un diablo va tras nosotros; pero cuando no tenemos nada que hacer, un ejército de diablos nos asaltan.»  San Juan Bosco, temía por sus jóvenes en los tiempos de vacaciones.  ¿Por qué?  ¡Por el tiempo libre que tenían los muchachos tenían en los meses de verano!  El santo decía que el tiempo de vacaciones era tiempo de cosecha para el diablo.  Cuando hay un hombre joven con tiempo libre, tiene un diablo a su lado, y esto lo lleva directamente al pecado contra la castidad.  El diablo hoy asoma su horrible rostro a través de la pornografía en el internet.

3.  UN CORAZÓN GOZOSO.  San Francisco de Sales y muchos santos han dicho en forma unánime, que el pecado engendra depresión y tristeza.  San Ignacio de Loyola nos advierte, que cuando el alma está en estado de desolación – triste, deprimida, con desánimo, espiritualmente con pocas fuerzas – es entonces que el diablo ataca.  Debemos siempre pedir al Espíritu Santo que nos de gozo; que nuestro semblante radie el gozo del corazón.  ¡Dios nos manda a que tengamos un corazón gozoso!  Recordemos las palabras de san Pablo a los Filipenses:  »Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres.» (Flp 4, 4)  Un corazón gozoso lanza al los diablos de impureza al fuego ardiente.

4.  EL SACRAMENTO DE LA CONFESIÓN.  La Biblia nos dice, que el hombre justo cae siete veces al día.  Si caemos en pecado de impureza, no debemos desalentarnos, debemos arrepentirnos inmediatamente y confiar en la misericordia de Dios.  Según el beato Papa Juan Pablo II y santa Faustina Kowalska, el atributo más grande (virtud) del Sagrado Corazón de Jesús es su infinita ¡MISERICORDIA.  Jesús vino al mundo, sufrió, murió y resucitó de entre los muerto para salvar al mundo de la realidad del pecado, y por cada uno de nosotros.  El sacramento de la Confesión sana el alma de la impureza e infunde en el alma la gracia para pelear la buena pelea, y correr la carrera y ganar la corona inmortal de la victoria.  El diablo no se cansa de desanimarnos.  Pero el Espíritu Santo nos anima, para que nos pongamos de pie y lo intentemos otra vez, como lo vemos de forma elocuente en la Parábola del hijo prodigo, o mejor dicho, la Parábola de Padre misericordioso.

5.  LA PALABRA DE DIOS.   Cuando vemos malas imágenes se queda un residuo tóxico en nuestra mente.  Y estas imágenes no se borran de la noche a la mañana.  Porque somos débiles pero Dios es siempre omnipotente y todopoderoso.  El conocido converso, Steve Wood, que ahora se dedica a escribir, es conferencista e imparte temas sobre la defensa de la familia, la santificación de los hombres, la lucha contra la adicción a la pornografía.  Steve Wood insiste en lo importante que es la lectura, la meditación y de aprenderse de memoria la Palabra de Dios.  Veamos una analogía.  Lo que hace el cloro a una alberca, la Palabra de Dios hace a la memoria.  Como el cloro purifica y mata bacteria, la Palabra de Dios deshace, limpia y purifica la memoria de las malas imágenes.  San Pablo compara la Palabra de Dios a una espada de doble filo, que separa médula de hueso.  La Palabra de Dios, separa las malas imágenes de la memoria y las elimina.  Que Nuestra Señora,  la purísima Virgen María, nos alcance con su Inmaculado Corazón la virtud de la pureza.  »Dichosos los puros de corazón, porque verán a Dios.» (Mt 5:8)

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

Sep 11 2013

COMBATIR PARA ALCANZAR PUREZA DE CORAZÓN

En 1917,
Nuestra Señora de Fátima seis veces se apareció a tres pastorcillos: Jacinta,
Francisco y Lucia.  María Santísima habló
con ellos y les reveló verdades importantes que hoy más que nunca tiene gran
relevancia.

PUREZA.  La Virgen de Fátima, la purísima Virgen Madre
de Dios, habló repetidas veces sobre la pureza. 
Dijo que el mayor número de almas se pierden por pecados de la carne,
pecados contra la virtud de la pureza.

LOS
MATRIMONIOS Y LA MODA.  Nuestra Señora
también reveló que muchos matrimonios son malos; ofenden gravemente a
Dios.  Igual dijo que se introducirían
ciertas modas que ofenderán gravemente a Dios.

Han pasado
casi 100 años desde que la Madre de Dios nos comunicó estas palabras.  Fue en 1917
en los tiempos de Segunda Guerra Mundial, en Fátima Portugal que Nuestra Señora
bajó del cielo.  Nuestra Señora reveló
que guerras se desatarían por la falta de oración y la proliferación del
pecado.

Presentaremos
medios espirituales para alcanzar tan necesaria y difícil virtud.  Que Dios nos conceda poder vivir la
bienaventuranza: »Dichosos los puros de corazón porque verán a Dios.» (Mt
5:8)

1.  FIRME RESOLUCIÓN DE LUCHA.  En una ocasión la hermana de santo Tomás de
Aquino le preguntó, cómo podía llegar a ser santa.  El doctor Angélico, conocido por sus
acertadas palabras respondió »¡deséalo!» 
En la psicología hay un principio fundamental, el determinante principio
de la motivación.  Simple y sencillamente
significa, que al menos que el ser humano tenga una noble y fuerte motivación,
jamás alcanzará alguna empresa digna. 
Tanto un exitoso deportista, como un adiestrado músico, un talentoso
escritor y los grandes santos tienen algo en común:  TIENE UNA MOTIVACIÓN.  En si, debería ser nuestro gran anhelo,
alcanzar la virtud de pureza.

2.  LA ORACIÓN. 
Una virtud no se alcanza con simple desearla, especialmente la virtud de
pureza.  La pureza, como la humildad o la
misericordia, no son virtudes naturales sino sobrenaturales.  Es decir, transcienden la carne y el hombre
natural.  Es indispensable tener
determinación.  Pero más necesaria es la
gracia de Dios.  Jesús nos anima, »Pidan
y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta.  Porque el que pide, recibe; el que busca,
encuentra; y se abrirá la puerta al que llama.» (Mt
7:7)  San Agustín, que en sus primeros
treinta años lucho por alcanzar esta virtud, dijo, todos somos mendigos ante
Dios.  ¿Por qué no pedir a Dios pureza de
corazón?  Cuánto desea nuestro Señor Jesus
darnos esta virtud, mas anhela Dios darnos esta virtud que nuestros la
deseamos.
3.  ¡CUIDADO CON LOS MEDIOS ELECTRÓNICOS DE
COMUNICACIÓN!  Leemos en Génesis, el
primer libro de la Biblia, que todo lo que Dios creo es bueno.   Dios nos llama a usar la creación para Su
gloria, y a que evitemos abusar de la creación para el placer de la
sensualidad.  La televisión, la radio,
las películas, la literatura, la computadora, el internet, todo se puede usar
para la mayor gloria de Dios y para nuestra salvación.  Sin embargo, estos mismos medios de
comunicación son un arma de doble filo, así nos dice el apóstol san Pablo.  Tristemente, los sitios de internet más
buscados son los sitios pornográficos. 
Por lo tanto, para alcanzar la virtud de la pureza, debemos ser
previsivos y procurar una constante vigilancia de nosotros mismos,
especialmente guardar recato de la vista al usar el internet.  Cuan cierto es el proverbio:  »Los ojos son el espejo del alma.»  Los padres de familia están llamados a la vigilancia
de si mismos, pero más que nada, vigilancia de sus hijos quien ¡solo conocen
esta cultura y edad de los medios de comunicación electrónica!

4.  MODESTIA. 
Como dicho previamente, Nuestra Señora de Fátima dijo que se
introducirían modas inmodestas que ofenderían gravemente a Dios.  El Catecismo de la Iglesia Católica afirma,
que el pudor es el guardián de la castidad. 
Todos, pero en particular la mujer, debemos guardar y cultivar
celosamente la virtud de la modestia, por que el pudor es la defensora de esta
virtud.  San Pablo nos enseña, que
nuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo y somos »embajadores de
Cristo».  San León Magno, en su homilía
de Navidad nos recuerda: »¡Reconoce, cristianos, tu dignidad!»  Un embajador mal vestido deshonra al país que
representa.  Por el bautismo, somos
miembros del Cuerpo Místico de Cristo.  Y
como embajadores, no representamos a un rey terrenal, sino a Jesús mismo, ¡el
Rey de reyes, el Señor de señores!  Toda
mujer que por rozarse con el sociedad moderna se haya dejado llevar por la
moda, debería contemplar a Nuestra Señora. 
Nuestra Señora de Lourdes, Nuestra Señora de Fátima, Nuestra Señora de
Guadalupe, Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, reflejan una belleza y modestia
inigualable.

5.  CONSAGRACIÓN AL INMACULADO CORAZÓN DE
MARÍA.  Sucedió en la vida de san Antonio
María Claret, que cuando era joven, cayo en cama enfermo.  Y cayó sobre él, como ráfaga de viento,
fuertes tentaciones contra la virtud de la pureza.  Como era un joven de disciplina y oración,
por instinto acudió a María con una humilde oración, para poder resistir tan
fuerte tentación.  Pero en vez de
desaparecer, la tentación aumentó.  El
santo con más insistencia llamaba a María, implorando que le diera pureza.  ¡Y algo pasó! 
María se le apareció, lo consoló y la tentación se disipó.  Y a la misma vez, el futuro santo vio cómo un
ejército de demonios salían corriendo del cuarto.  El santo atribuyó la victoria, no a sus
propias fuerzas, sino a la poderosa intercesión de María.  San Antonio hizo esta observación.  Una mujer hermosa y provocativa causa malos e
impuros pensamientos.  Sin embargo,
cuando se contempla a María, la mujer más hermosa en la creación de Dios, los
malos pensamientos desaparecen dejando solo pensamientos puros y nobles.  San Antonio, fue fundador los Claretianos,
honrando en forma especial, al Inmaculado Corazón de María.

CONCLUSIÓN.   Hemos enumerado cinco pasos para alcanzar la
virtud de pureza.   Si vivimos la pureza,
seremos premiados con ¡el cielo!  Jesús
nos promete:  »Dichosos los puros de
corazón, porque verán a Dios.»  (Mt
5:8)  San Juan Berchmans, S.J. nos anima
con estas palabras:  «Quiero
mantener mis ojos puros en esta vida para contemplar la belleza del rostro de
María en el cielo.» 
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

Sep 09 2013

FORMAR LA CONCIENCIA.

CONCIENCIA. Dios ha
dado a cada persona una conciencia, una conciencia que debemos formar, cultivar
y seguir, pero sólo cuando la hemos formado debidamente.

De no hacerlo, sería una conciencia mal
formada.  Pero tener una conciencia recta, requiere de mucho cuidado y esfuerzo.
 
¿QUÉ ES UNA
CONCIENCIA MAL FORMADA?

1.  CONCIENCIA LAXA.  Este tipo de conciencia solamente se
estremece con los pecados más atroces, como lo son matar, el adulterio o un ataque
terrorista.  Una conciencia laxa reconoce
y admite que estos actos son malévolos, per otros pecados los ve como la cosa más normal.

2.  CONCIENCIA SUPRIMIDA.  Esta es una conciencia que vive en la negación, el auto engano, es una onciencia que justifica el pecado.  El rey David
cometió adulterio con Betsabé, pero peor que el adulterio, mató a un hombre
inocente.  Leemos en las sagradas
Escrituras, que David se fue a descansar y estaba en paz.  David estaba en paz hasta que Dios en su
bondad, manda al profeta Natán, y por medio de una parábola, traspasa las
barreras de su razonamiento, y libera esa consciencia suprimida.  Sucede que después que pecamos, el diablo trata de adormecer nuestra conciencia, pero Dios como el lebrel
del cielo (Lebrel del cielo, de Francis Thompson), inquieta nuestra
conciencia para conducirnos hacia la luz de la Verdad.

3.  CONCIENCIA DEFORME.  Quien no ha escuchado la Palabra de Dios, o
leído la Biblia, o escuchado un sermón, o hablado con un sacerdote o religioso,
tiene sólo una formación moral secular, mundana o pagana, una conciencia que
se ha deformado.

4.  CONCIENCIA DUDOSA.  En el torbellino del los acontecimientos de
la vida, en ocasiones surgen situaciones en donde no sabemos que decisión
tomar.  No sabemos lo que es bueno y lo
que es malo, ¡no sabemos que hacer!  La
verdad existe, pero la desconocemos.  Qué
deberíamos hacer en ésta circunstancia. 
¿Acaso deberíamos simplemente tomar una
decisión?  ¡Claro que no!  Si actuamos, podríamos estar ofendiendo a
Dios con una decisión moralmente equivocada! 
Lo más prudente y recomendable es buscar alguien que nos ayude a
discernir cual es el camino recto, noble y verdadero.  Se podría consultar con un sacerdote o
director espiritual, o quizás consultar a un amigo que tenga buen juicio, o un
manual de teología moral.

5.  CONCIENCIA ESCRUPULOSA.  Esta es una conciencia enferma.  La persona que sufre de este tipo de
conciencia, lo ve todo como pecado, y sufre una crisis perpetua de  remordimiento.  La persona escrupulosa está ciega a lo que
objetivamente es pecado.  La teología
espiritual presenta un remedio seguro. 
La persona debe buscar un buen director espiritual, o un buen confesor, un confesor
paciente, y debe dejarse guiar por esta autoridad competente.  Tanto santa Teresita de Lisieux como san
Maximiliano Kolbe pasaron por una etapa de escrupulosidad.

6.  CONCIENCIA MUERTA O CAUTERIZADA.  Dios nos ha dado libre albedrío, somos libres
de sofocar los remordimientos de conciencia, pero si lo hacemos, acabaremos por
matar la conciencia.  Uno de los mejores
ejemplos bíblicos es el relato del FARAÓN, a quien en los tiempos de Moises,
Dios le manda una serie de plagas.  Dios
llamó al corazón del faraón con diversas formas de penas y tribulaciones.  Con obstinación, resistencia y soberbia, el
faraón tenazmente luchó y resistió a Dios, cuando resistió a Moisés y las
plagas.  Igual podemos poner resistencia
a las invitaciones de gracia de Dios, pero acabaremos matando nuestra conciencia,
y aunque físicamente vivos, nuestra conciencia estará muerta.


7.  CONCIENCIA MAL INFORMADA.  En la vida, siempre habrá alguien quien nos
de mal consejo respecto alguna cuestión moral. 
Y por ignorancia, seguimos el consejo. 
Pero una vez conscientes de nuestro error, nos incumbe rechazar esa
postura errónea, corregir el error y caminar a la luz de la verdad.  Tanto jóvenes como adultos, deben escoger sus
amigos y conocidos con cuidado.

8.  REMORDIMIENTO DE CONCIENCIA.  Simple y sencillamente, esta es una
conciencia que no está en paz.  La razón
es obvia:  la persona ha cometido un
pecado y el remordimiento le invade.

9.  CONCIENCIA SANA.  Se ha dado una descripción de distintas
conciencias malsanas.  ¿Cómo es que
podemos formar una sana conciencia?  Para
empezar,  moralmente estamos obligados de
esforzarnos por formar nuestra conciencia sanamente.  Porque de lo contrario, caemos en pecado de
omisión al dejar de hacer lo que deberíamos hacer.  Una conciencia sana es una conciencia bien
formada, que responde debidamente a buenas acciones como a las malas, el
pecado.  Una persona con una conciencia
sana, tiene remordimiento de conciencia después de haber cometido un
pecado.  Después de haber pecado, pasa
por un periodo de tristeza, coraje, confusión y desorientación.  Todas son síntomas de una conciencia
sana.  Igualmente, cuando la persona obra
bien, cuando hace algo que agrada a Dios, ¡el Espíritu Santo le colma de una
paz y consuelo que sobrepasa toda aspiración natural!

10.  CONCIENCIA DELICADA.  Sería negligencia de nuestra parte, si no mencionamos
brevemente otro tipo de conciencia, la más fina de las conciencias, que
llamamos, una conciencia delicada.  ¡Esta
es la conciencia de los santos!  Todos
deberíamos aspirar por alcanzar esta nobleza de conciencia.  ¿Como se manifiesta una conciencia
delicada?  Una conciencia delicada
detecta todo:  el pecado grave, le pecado
venial, inspiraciones del Espíritu Santo y sabe cuando no a respondido a ellas.  En verdad, todos deberíamos esforzarnos, con
la ayuda de Dios, por alcanzar esta conciencia de los santos!
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

Sep 07 2013

OBSTACULOS EN EL CAMINO AL CIELO

El propósito de
nuestra vida es simple y sencillamente, llegar al cielo. 
Jesús nos advierte, que el camino al cielo es estrecho y angosto y pocos lo toman.  ¡Muchos eligen el camino amplio, cómodo y fácil que
conduce a la destrucción.

Es bueno conocer cuáles son estos obstáculos.  Tal como es bueno que el pastor sepa en dónde se esconde el lobo, o el soldado sepa
por donde piensa atacar el enemigo, o el atleta conozca el punto débil de su contrincante.  El
soldado de Cristo también debe conocer sus más grandes obstáculo

1. LA PEREZA.   El libro de Apocalipsis nos advierte que tanto la
pereza como la apatía le desagradan a Dios. «No eres ni frío ni
caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! 
Ahora bien, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, voy a
vomitarte de mi boca.
(Ap 3)   ¡Con
qué facilidad podemos perder nuestro primer amor, rendirnos a la apatía,
entregarnos al desaliento y perder el fuego de la pasión por Cristo!  ¿Por qué sucede esto?  La apatía social, el diablo y el efecto del
pecado original contribuyen a este desgano que llamamos pereza.   Los santos estaban perfectamente
conscientes de la brevedad de la vida y el precio de nuestra salvación, la
Sangre Preciosa de Jesús.  Por esto, con
espíritu generoso, se dedicaban completamente al servicio de Dios.

2.  DISTRACCIONES.  Nunca como hoy, han habido tantas
distracciones.  ¿A qué nos referimos
cuando decimos distracciones?  La
televisión, el internet, deportes, fiestas, actividades sociales, largas
conversaciones telefónicas, vacaciones, mascotas, cosméticos — ¡todas eson
distracciones!  Y no que estas
distracciones sean necesariamente pecaminosas, pero fácilmente usurpan
el lugar que le pertenece solo a Dios! 
Estas distracciones se convierten fácilmente el centro de nuestra vida y nos apartan a
Dios cada día más y más, ¡alejándonos como el barco que se aparta
del puerto y desaparece en el medio del mar!

3. SENSUALIDAD.    La sensualidad en todas sus formas, igual puede distanciarnos de Dios.  El
comer, beber, fumar, el uso drogas, el apetito sexual desordenado, una vida
cómoda — todas son manifestaciones de sensualidad.  Un ejemplo patente de los efectos
perniciosos de la sensualidad es la parábola de Lázaro y el hombre rico.  El hombre rico no parecía ser hombre
malo.  Sin embargo, terminó en
el infierno.  ¿Por qué?   No tanto por lo que hizo, sino por lo que
dejó de hacer.  Por su pecado de omisión, este miserable hombre fue a dar
al fuego que nunca acaba.  Los manjares
suculentos, sus ropas caras y su estilo de vida le cegaron de ver a Jesús bajo el disfraz
sufriente de la persona de Lázaro, el hombre pobre, sucio y cubierto de llagas.
                 
4.  RESENTIMIENTO Y FALTA DE PERDONAR.   Hoy en día los resentimientos y la falta de
perdón hace de muchos esclavos
modernos.  Las cadenas que los atan no
son tanto físicas sino grilletes morales. 
En el Padrenuestro rezamos, «Perdona nuestras ofensas como nosotros
perdonamos a los que nos ofenden…»
  
En otras palabras, para que yo sea perdonado y reciba la misericordia de
Dios, debo yo primero perdonar y ser misericordioso.  Es una vía de doble sentido.  Jesús vino para liberar a los cautivos.   Cuando perdonamos a quien nos ha hecho daño,
libramos al cautivo.  ¡Y ese cautivo soy yo!  
Me libro de jaula de rencor y experimento la libertad de los hijos de
Dios.

 5.  IGNORANCIA.  
¿Cómo podemos amar a alguien que no conocemos?  ¡Es imposible!  ¿Cómo podemos amar a un «Dios
desconocido»?  ¡Es imposible!  Tanto
el agnosticismo como el ateísmo son ideologías teológicas que se están
extendiendo como un incendio forestal, especialmente en los Estados
Unidos.  Un ateo es aquel que niega la
existencia de Dios.  Un agnóstico es
aquel que vive en un estado de perpetua incertidumbre.  Cuando se desconoce algo, cualquier que sea
el tema, la ignorancia se cura aplicándose al estudio.  Como en cualquier ámbito, un profesional debe
capacitarse y mantenerse al día, a la vanguardia y en continua formación.  Cristianos-católicos igual deben ser
»profesionales» con respecto a su religión y Dios.  Su más ardiente anhelo debería ser conocer
mejor a Dios, para amarlo más ardientemente, seguirle más de cerca y acercar a
otros hacia Él.

Estemos entonces,
conscientes de estos cinco obstáculos en nuestro camino al cielo:  pereza, distracciones, sensualidad,
resentimientos y la ignorancia.
Que María Santísima,
quien se dio sin reservas a Dios, nos ayude a superar los obstáculos en nuestro
camino, para así alcanzar la dicha eterna. 
María, Puerta del cielo, ¡ruega por nosotros!
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

Sep 03 2013

ATRAVESANDO UN CAMPO MINADO DE ÍDOLOS

»Si no adoramos al verdadero Dios, acabaremos
por adorar a un dios falso.» afirma santo Tomás de Aquino.  ¡Cierto!  Un ÍDOLO es un dios falso.

UN ÍDOLO es toda persona, objeto o lugar que colocamos por encima de Dios.  Dios es un Dios celoso, no quiere segundo lugar sino el primer lugar, por encima de toda persona, objeto, idea o lugar.

MOISÉS.   Después de recibir los diez Mandamientos de Dios, Moisés desciende de la montaña y encuentra al pueblo adorando a un ídolo, un
dios falso, un becerro de oro.  Lleno de ira, Moisés rompe las tablas de la ley, derrumba el becerro de
oro, lo pulveriza y arroja el polvo al agua.

Como en los días de Moisés, hoy también se forman y levantan becerros de oro que son
públicamente el objeto de culto. 
Imposible contar todos los ídolos, ¡pero señalaremos tres!

Claro, hoy nadie fundiría oro para levantar un ídolo como
aquel becerro adorado por los israelitas, pero sí existen otros becerros, otros idolos que usurpan el lugar que solo le
pertenece al Señor.  En nuestro tiempo, ya no son ídolos de fundición, sino a veces
de carne y hueso.
1.  MATERIALISMO. ¿Cuántos no han puesto lo
material por encima Dios? 
El beato Papa Juan Pablo II nos dice cuál es el debido orden de las cosas:
«Es más importante ser que tener, y del ser es que se logra hacer.  El psicólogo-escritor moderno
Erich Fromm lo describe así: «Si eres lo que tienes y pierdes lo que
tienes, ¿entonces quién eres?» 
Leemos en el Evangelio, que el hombre rico de la parábola perdió su
alma, no tanto por lo que hizo, sino por lo que dejó de hacer.  ¿Por qué? 
Sus posesiones le cegaron, de forma que no pudo ver a Jesús presente en la persona de
Lázaro, en la persona del pobre y el olvidado. (LC 16: 19-31)  Nuestro nuevo Papa Francisco, quien tomó el
nombre de san Francisco de Asís, demuestra un estilo de vida de sincera
humildad, desprendimiento y pobreza evangélica.   ¡Gracias a Dios!  Esa fue la enseñanza de Jesús, en una de las
bienaventuranzas, »Bienaventurados los pobres de espiritu, porque de ellos es el Reino de
los Cielos.»
(Mt 5:3)  Para
contrarrestar el ídolo del materialismo, analicemos honestamente nuestra vida,
¿tenemos «demasiado»? ¿Vivimos con sobreabundancia?  ¿Nuestro guardarropas está que estalla?  ¿Nuestra nevera está siempre llena, acabamos
por tirar comida?  ¡Que desperdicio!  Retemonos, ¿cómo puedo dar a los pobres y
necesitados?  ¿De qué forma concreta
puedo manifestar mi solidaridad con ellos? 
No olvidemos lo que dice Jesús: «En verdad os digo que cuanto
hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo
hicisteis.»
(Mt 25,40)           

2.  CONSUMISMO.  
Estrechamente ligado con el ídolo del materialismo está el
«consumismo».  Este dicho
moderno resume lo que es el consumismo: «Salir de compras hasta que el
cuerpo aguante».  En Estados Unidos,
el conocido Viernes Negro (en inglés Black Friday) es el día que inaugura la
temporada de compras navideñas con significativas rebajas en muchas
tiendas.  En las afueras de las tiendas,
esperan cientos de personas, que incluso guardan lugar toda la noche, ¡esperan
para estar entre los primeros en comprar!  
Hace unos años sucedió una tragedia en Nueva York.  Era el día del famoso Viernes Negro, las
puertas de Wal-Mart abrían para empezar las compras, la gente como una
estampida de búfalos, desenfrenados, furiosos, desesperados y frenéticos y
entran al Wal-Mart para comprar. 
Arrollaron y mataron a uno de los empleados de Wal-Mart.  Sucedió entonces, que el encargado cerró la
tienda por el duelo de haber perdido a uno de sus empleados.  Pero las cosas no se quedaron así.  Afuera los consumidores estallaban de rabia
por no poder entrar a comprar.  Dicen que
una imagen vale más que mil palabras, ¡qué podríamos decir de esta escena!  Vemos claramente en dónde esta el corazón de
muchos.  Parece ser más importante el
objeto que la persona.  El CONSUMISMO
ocupa el primer lugar para muchos.  Como
discípulos de Jesús, Nuestro Señor y Salvador, creemos firmemente que el valor
innato del ser humano supera el valor de todo el universo creado.  En verdad, toda la creación es un regalo de
Dios al hombre, para que el hombre alcance la vida eterna.

3.  MEDIOS DE COMUNICACION ELECTRONICOS.  Por supuesto, todo lo que Dios creo es
»bueno».  En los últimos veinticinco
años, ha habido una explosión de aparatos electrónicos que han cambiando el
mundo de forma radical.  La televisión,
la computadora, el internet, teléfonos Black-berries, I-PAD, I-PHONE, Kindle,
teléfono móvil/smart phone, programas de transmisión simultánea, SKYPE –  estos medios de comunicación son de gran
utilidad para dar a conocer el Evangelio y los valores cristianos.  Pero no ignoremos los peligros que también
abarcan.  La pornografía se ha convertido
en la más fuerte adicción en el país.  Un
sinnúmero de personas esclavos de fuertes adiciones, y la situación va de mal
en peor.  La comunicación entre esposos,
entre padres e hijos, ha sido grandemente afectada.  En gran parte debido al uso desordenado y
excesivo del juegos y aparatos electrónicos. 
Una escena que tristemente se ve muy a menudo es la familia sentada
viendo televisión, todos juntos aparentemente. 
¿Pero en realidad existe esa cercanía entre ellos?  Papá viendo televisión, mamá ocupada mandando
un correo electrónico, Margarita (la hija mayor) con los auriculares puestos,
Guillermo texteando a mil por hora, y la mascota »Campeón» con la patita
pegándole a un aparato electrónico.  Esta
escena causa gracia, pero también nos lamentamos porque sabemos que en cierto
sentido, esto es lo que se vive en casa. 

CONCLUSIÓN:  ¡EL RETO ES NUESTRO!   Hemos enumerado tres ídolos modernos, dioses
modernos, que miles de personas han entronizado como dioses,  ¡IDOLATRIA! 
Pero hay otro camino que podemos emprender.  De forma consciente y deliberada, pongamos a
Dios, a Jesucristo, Nuestro Salvador y Señor, como el centro de nuestra
vida.  Esto se debe hacer de forma
concreta y deliberada.  Porque tentaciones
son muchas, y vienen en todo momento y a cada rato, por lo tanto, el propósito
de seguir a Cristo lo debemos hacer todos los días. 
Para preparar el
camino e iluminar nuestras mentes, concluimos con unos versículos del
Evangelio.  Solo así podremos ser Cristo
céntricos y contra culturales.  Jesús nos
enseña el más grande Mandamiento: «Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es
el único Señor, y amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu
alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.  El segundo es: Amarás a tu prójimo como a ti
mismo. No existe otro mandamiento mayor que éstos.» (Mc 12:29-31)  Tengamos presente estas palabras de Jesús al
comienzo de cada día, y al final del dáa, hagamos un examen de conciencia de
nuestra fidelidad.  Que Nuestra Señora,
Madre del buen consejo, nos alcance la gracia de evitar estos ídolos modernos y
arraigarnos en Jesús, el Hijo de Dios, el Camino, la Verdad y la Vida.
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

  • « Previous Page
  • 1
  • …
  • 1319
  • 1320
  • 1321
  • 1322
  • 1323
  • …
  • 1479
  • Next Page »

© Copyright 2016 Oblates of the Virgin Mary · All Rights Reserved