Padre Edward Broom, OMV (P.Escobita)

Espiritualidad Católica Ignaciana y Mariana

  • LECTURAS DEL DIA
  • ARTICULOS
  • Audios
  • MINI CATECISMO
  • Videos
  • P. Escobita
    • P. Escobita
    • San Pedro Chanel
  • English

Ago 19 2016

LAS OLIMPIADAS DE CRISTO REY, CORRAMOS LA CARRERA DE LA FE

 

Momentos emocionantes, imágenes poderosas, cautivadoras y desbordantes de energía, historias únicas – estos son los sentimientos de admiración que están ocasionando los atletas de las olimpiadas en millares de personas. Es indudable que los juegos representan una gran fiesta de las habilidades de las capacidades humanas, ya sea carreras de velocidad, remo, natación, ciclismo, tenis, vóley playa o gimnasia. Estos atletas resaltan la admiración y respeto del mundo que se fija en la velocidad de los pies, nuevos records mundiales y distintos eventos del atletismo mundial.

Los primeros reportes de los juegos olímpicos datan a los años antes de Nuestro Señor Jesucristo. San Pablo, quien fue ciudadano Romano, escribió muchas cartas en el curso de su actividad misionera, y en más de una de ellas usa la imagen de los juegos olímpicos: “He peleado la buena batalla, he corrido la carrera y he permanecido fiel. Ahora Ahora me espera el premio, la corona de justicia que el Señor, el Juez justo, me dará… “ (2 Tim 4:7-8)

La rigurosa disciplina que dedican los atletas antes del inicio del proceso de clasificación para es asombrosa. Entrenan para la competencia años antes de llegar a las olimpiadas siguiendo una rigurosa dieta, siguen rutinas de fortalecimiento por meses, años enteros. En su dedicación, estos hombres y mujeres comprometidos, renuncian a esos placeres de la vida que podrían empañar su meta de alcanzar ganar una medalla de oro. Esta es la historia de la fe inquebrantable de lograr, de conquistar, de alcanzar una meta!

Y por supuesto, la meta en las olimpiadas es ganar, no solo una medalla, sino la medalla de ORO! Este es el ideal y la meta de cada participante. ¿Ganaré la medalla de oro?  El tiempo lo dirá; los ojos de este hombre o mujer están puestos en la medalla de oro. Esta es la lucha que esta detrás de los triunfos olímpicos.

Seguiremos este esquema, pero cambiando el enfoque, aplicándolo a nuestra vida espiritual. El objetivo es suscitar y alimentar una más decidida toma de conciencia de la responsabilidad que tenemos respecto a nuestra vida espiritual. En el plano espiritual, todos estamos llamados a ser atletas de Cristo, estamos llamados a correr la buen carrera, pelear la buena batalla y ganar la corona que espera a los con fidelidad siguen a Cristo.

La diferencia entre el atleta olímpico y el atleta de Cristo es monumental, porque el que corre por Cristo no lo hace para alcanzar fama, honores, premios, elogios y aplausos de los medios de comunicación. El atleta de Cristo no corre o compite por la medalla de oro, plata o bronce, o para que su fotografía salga en todas las portadas o para alcanzar fama y reconocimiento mundial.

Vanidad de vanidades, todo es vanidad,” dice la Palabra de Dios; al menos de que sea nuestras acciones sean dirigidas para dar gloria a Dios, y para trabajar por la salvación de nuestra alma, todo es vanidad. Para el que corre por Cristo, la medalla de oro es la salvación de su alma inmortal.

Es más, el atleta robusto de Cristo no se conforma con alcanzar su propia salvación sino que se ocupa de ganar el mayor número de almas para Jesucristo, el “Señor de Señores, y, Rey de Reyes”.

¿Qué encierra esto concretamente? Simple y sencillamente se trata de tener determinación y decisión, disciplina espiritual, ser perseverante y fijar la mirada interior en la meta final: el CIELO, en donde Cristo Rey espera a sus fieles y perseverantes atletas.

Son tres las áreas de disciplina que el atleta de Cristo necesita desarrollar para entrar en las “olimpiadas” y ganar la medalla de oro que no se empaña, ni se corroe o se oxida. Debemos apreciar, valorar y procurar afanosamente esta disciplina cada día. Y es la siguiente:

DISCIPLINA ESPIRITUAL: LA ORACIÓN. La oración es el oxígeno del alma. Sin la oración, le faltará el oxígeno al atleta de Cristo. Es como un buso sin tanque, un corredor de velocidad sin piernas, o un nadador sin piscina. El que corre la carrera por Cristo, no solo debe de dedicarse a la oración, sino que debe esforzarse por crecer y profundizar en la oración. La oración es dialogar con Dios, es amistad y unión con Dios, es adentrarse en la fuerza de Dios. Ningun santo – atletas que han triunfado en el plano espiritual – logró el premio de la salvación sin haber trabajado afanosamente y luchado por su vida de oración, con trabajos y dificultades pero ganaron porque fueron perseverantes en la oración.

DISCIPLINA SACRAMENTAL: Nosotros, los discípulos del Rey de Reyes y Señor de Señores, Jesucristo, amamos nuestra fe, amamos Su Cuerpo Mistico que es la Iglesia, que es e, y ante todo, los SACRAMENTOS. Los Sacramentos son signos sensibles y eficaces de la gracia, instituidos por Cristo. Dios comunica la gracia a su Iglesia de diversas formas, pero la forma más eficaz y abundante es mediante los Sacramentos. Estos son los dones más sublimes y poderosos dados por Jesucristo a su Iglesia. Cuan agradecidos debemos estar a Nuestro Señor por su inmensa bondad. Él prometió que no nos dejaría huérfanos. Por lo tanto, Él está presente en su Iglesia, y su gracia fluye abundantemente, como un océano, en los Sacramentos. El que corre al carrera por Cristo debe recibir el sacramento de la Reconcilación y la Santa Eucaristía con regularidad y con la mayor disposición. En una palabra, el atleta de Cristo debería anhelar y añorar recibir los sacramentos mejor cada vez. Qué bueno es el Señor, que deja caer sobre nosotros como torrentes de agua, su gracia mediante los sacramentos. La Confesión sana las heridas causadas por nuestros pecados; la Santa Comunión alimenta nuestra alma hambrienta y sedienta con el Cuerpo y la Sangre de Jesús, nuestro Amo, Rey y Señor!

LA DEVOCIÓN MARIANA. Los atletas de Cristo también son atletas de la Santísima Virgen María. La gracia es la fuerza espiritual que impulsa y da vida a los atletas de Cristo. Uno del los títulos más gloriosos dados a la Santísima Virgen María son las palabras dichas a ella por el arcángel Gabriel en la anunciación, “LLENA DE GRACIA”.   En efecto, desde la Inmaculada Concepción de María en el vientre de su madre, santa Ana, hasta su asunción al cielo en cuerpo y alma, nuestra amadísima madre, la Virgen María creció en gracia. En efecto, todos que aman a María, todos los que la invocan, que se consagran a ella, y procuran acercar a otros a ella, recién gracias singulares de ella. Y una de estas gracias singulares es la gracia de crecer en la gracia. ¿Qué es la gracia? Dicho de forma sencilla: la gracia es en el ámbito espiritual, la vida del alma, es unión y amistad con Cristo. De todos los regalos que podemos recibir aquí en la tierra –atletas en rumbo a la Patria Celestial – ¡la gracia de Dios es el tesoro más grande! ¡Y una vez que alcanzamos el cielo, esa es la medalla de oro que recibe quien es victorioso de manos de Jesús, el Señor de Señores y Rey de Reyes!

En conclusion, el verdadero discipulo de Jesús y María, el corre verdaderamente la carrera de Cristo abrazan la disciplina del cuerpo, mente, corazón y alma, abrazando un robusta vida de oración, fomenta su vida sacramental y procura una filial devocion a María, Madre de Dios y Madre nuestra, para poder correr la buena carrera y lucha la buena batalla hasta ganar la corona de gloria que espera a los campeones espiriales del Señor!

El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

 

 

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS · Tagged: cristo, Jesús, olimpiadas, rey

Ago 15 2016

VILEZAS DEL DIABLO PARA LA PERDICION DE LAS ALMAS



En las Dos Banderas, texto clásico de la espiritualidad ignaciana, san Ignacio nos presenta en marcado contraste a Jesús y a Satanás. Jesús está de pié ante la gran ciudad de Jerusalén, su aspecto es humilde y atractivo por su gloria y hermosura. De lado opuesto, Satanás; su apariencia es horrible y él está en aquel gran campo de Babilonia sentado sobre un estercolero. Jesús nos invita a alistarnos bajo su estandarte, nos invita a que abracemos la pobreza, los insultos, el menosprecio, la humildad, así como todas las otras virtudes. Satanás, por su parte, invita a que abracemos las riquezas, los honores vacíos, el desmesurado orgullo, y luego incita a que abracemos todos los demás vicios. (Ejercicios Espirituales de San Ignacio: Las Dos Banderas: No 136-147) Puesto que somos libres, Dios nos deja que hagamos nuestra propia elección.

¿CUÁLES SON LOS NOMBRES DEL DIABLO? A través de la historia, la Biblia y los santos han dado nombres al diablo. Para comenzar veremos los nombres que la Biblia da: Satanás, Lucifer (portador de luz), demonio, diablo, príncipe de este mundo, la antigua serpiente y el acusador. Jesús llama al diablo, “un mentiroso y asesino desde el principio” (Jn 8) y Belcebú, que significa “dios de las moscas”.

En el presente ensayo señalaremos las formas en que el diablo, quien según san Ignacio es el “enemigo de nuestra naturaleza humana”, la forma en que nos engaña y nos miente con el fin de convencernos a que abandonemos nuestra vida de oración, disminuya nuestra oración, disminuya el fervor y su eficaía. Dice la Palabra de Dios, que al asumir seguir a Cristo, nuestra vida se vuelve una militancia, estamos en guerra, vivimos en un campo de batalla. Pero, san Pablo nos alienta: “Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?”


REPERTORIO DE VILEZAS Y ENGAÑOS DEL DIABLO QUE QUIERE NUESTRA PERDICION:

  • ¡MAÑANA! El diablo nos dice “mañana”; reza mañana, ¿cuál es la prisa? ¡Tranquilo! ¡Puedes hacerlo “mañana”!
  • MENOS. El enemigo nos dice, porque rezas tanto, es demasiado, se te está pasando la mano, te estás haciendo daño, ¿rezas toda UNA hora? Es demasiado! Haz un poco menos, con media hora basta!
  • REZA MAÑANA. Lucifer podría convencerte de esta forma: “Mira, no te sientes bien. Por qué no esperas hasta que mejores y luego sí puedes rezar. ¡Dios es comprensivo!
  • CONSIDERALO TU TRABAJO TU ORACION. Satanás susurra a tu oido: “Trabaja fuerte, y ofrécelo como oración. Es mejor trabajar que orar, porque al trabajar, estás ayudando a tu prójimo. San Pablo dice: “Trabajen por su slavación con temor y temblor” (Fil 2: 12) Sepan que el diablo incluso citará las Sagradas Escrituras pero las abusa distorsionándolas para lograr su fin – ¡nuestra condenación!
  • ¡PIERDES EL TIEMPO! El demonio te engaña cuando te dice: “Admítelo, pierdes el tiempo; tu tiempo es valioso, podrías estar haciendo algo mucho más importante y de más provecho.” Mira a famosos Benjamin Franklin, él no rezaba mucho, y mira que bien le fue!”
  • ¡ERES UN FANÁTICO! Lucifer tiene un sinfín de artimañas, uno de ellos es alborotar a nuestros seres queridos para que ellos no nos dejen en paz y se burlen de nosotros diciéndonos: “Eres un fanatico; ¡te has vuelto loco! No olvidemos, que a Jesús también lo llamaron ¡desquiciado!
  • ¡HIPÓCRITA! El enemigo tiene artillería, otra de ellas es este: “Te crees un santo porque rezas mucho, pero igual cometes errores, ¡mira lo que haces! ¡Eres un hipócrita!
  • DIOS NO TE AYUDA. El acusador puede lanzar acusaciones parecidadas: “Si estuvieses tan cerca de Dios porque rezas tanto, nunca hubieras caido en ese pecado.” “Deja de una vez por todas la oración que de nada te sirve.”
  • EL DIABLO DE LA IMPUREZA. Muchos de los santos como santa Catalina de Sena, san Benedicto, santa Margarita Alacoque, sto Tomás de Aquino fueron atacados despiadadamente por el diablo de la impureza; fueron atacados en su tiempo de oración, incluso cuando estaban ante Jesús Sacramentado. El arma con que dispara el diablo es esta, nos dice: “Si tu oración es tan importante, Dios no permitiría estos pensamientos tan humillantes y penosos pasen port u imaginación. ¡El diablo no se da por vencido, el ataca a toda hora!
  • EL DIABLO DE LA GULA. Cuántas veces no pasa que justo cuando estamos en nuestra hora de oración, el diablo se disfraza de chef, presentándonos un exquisite platillo que nos devoremos. ¡El diablo conoce nuestra debilidad!
  • EL DIABLO DEL CANSANCIO Y LA SIESTA. Conocemos bien lo que pasó la noche del primer Jueves Santo cuando Jesús se encontraba en el huerto de los Olivos absorto en oración. A poca distancia de Jesús se encontraban los tres amigos más entrañables de Jesús: Pedro, Santiago y Juan. Pero qué hacían? Dormían! Suele suceder, que cuando vamos a hacer nuestra oración, nos da sueño, o quizás aún, nos quedamos dormidos. La ausencia de la oración es motivo por el cual abandonamos a Nuestro Señor y caemos en pecado – la prueba está en los Apostoles quienes se quedaron dormidos en el huerto de los Olivos y horas más tarde huyeron de la cruz, y, Pedro negó a Jesús, no una vez, ¡sino tres veces!
  • PRIORITARIZAR. La serpiente antigua, el diablo, nos puede tentar con mentiras como estas: “Si ayudas a los pobres, los desvalidos, los enfermos agradarías más a Dios en vez de perder tu tiempo con la oración. De hecho, Jesús dijo que Él está verdaderamente presente en los pobres, los enfermos, los que tienen hambre y los encarcelados. Si ayudas a los más pequeños esto bastará.
  • LA ORACIÓN VOCAL BASTA. El diablo incluso puede usar argumentos validos para que hagamos algo bueno y dejemos de hacer algo superior que agradaría mucho más a Dios. El enemigo nos dice esto: “Haz tus oraciones rapido, repítelas sin pensar; basta con solo repetirlas.” La oración mental, la meditación y contemplación y la Hora Santa, eso déjalo para monjas y sacerdotes, no es para tí. Tu vocación no es rezar, no te confundas.
  • CON QUE TE CREES UN SANTO. Una vez más, podría pasa con tus amigos o conocidos, o incluso con tu familia cuya fe deja mucho que desear; es el mismo diablo quien pone estas palabras en su boca: “Crees realmente que porque rezas tanto que eres un santo, listo para tu canonización! ¡Seguramente están por hacer estampitas con tu imagen!
  • RECORDAR PECADOS DEL PASADO. El tentador igual puede lanzar ataques interiormente con un insidioso pensamiento que no te deja: “En tu vida pasada, haz cometido tantos pecados; quién eres para ahora dedicar tantas horas a la oración?
  • EL MUNDO Y LA ORACIÓN. El diablo, se aprovecha de la mente, lanzando dardos venenozos, especialmente por medio del mundo y cosas como: “Tu mente y memoria estan tan llenos de inmundicia, de pensamientos asquerosos y te atreves a arrodillarte en oración. No eres digno de rezar tanto.”
  • MEDITACIÓN HORIZONTAL. Igual el diablo del confort y la pereza te pueden convencer que descanses un poco más, que no te levantes de la cama y que ahí hagas tu meditación, y qué pasa, ¡acabas dormido! Esto es el diablo de la meditación horizontal; o si prefiere, el diablo de la CONTEMPLACIÓN HORIZONTAL.
  • EL DIABLO QUE DICE QUE DIOS ES SORDO. El diablo es astuto y puede convencernos que Dios no nos oye. ¿Cómo es que nos convence tan facilmente? Por el hecho que tenemos tiempo pidiendo a Dios por una intención, y Dios parece no escucharnos. El diablo nos dice, “Dios no te escucha, por qué siguir pidiendo, no pierdas tu tiempo y el de Dios.”
  • EL DIABLO DEL “MANAÑA”. “Todos necesitamos unas vacaciones; tómate unas vacaciones de tu oración también.” Date un pequeño descanso y a Dios también, regresa a la oración la próxima semana. Dios es comprensivo.”
  • CON IR A MISA BASTA. Lucifer: su nombre significa “estrella de la mañana” o “portador de luz”, ahora el diablo es un ángel pervertido y mentiroso, y levanta una oración contra otra. Podría decir esto: “La Misa es la oración más grande. Ve a Misa y deja tu oración mental, deja tus meditaciones y contemplaciones.”
  • FANATISMO RELIGIOSO: El diablo usa otra artimaña para engañarnos, “No son pocos los fanáticos que van a dar al manicomio por rezar mucho; y para allá vas, ¡prepárate! Prepara tus maletas que para allá vas!
  • UNA CONSCIENCIA EQUIVOCADA. El diablo para obstaculizar nuestra salvación, convenciendo al pecador que no acuda al Confesionario.   Pero vivir con una consciencia intranquila puede obstaculizar la oración.
  • EL DIABLO DEL PLACER. En la sociedad moderna y hedonista que enfoca especialmente en lo exterior, el diablo puede convencerte para que dejes tu oración con estas palabras: “Sólo se vive una vez, disfruta cada momento de la vida porque un momento se va y no vuelve, diviértete, pásala bien! “Es momento de tomarte una cerveza Miller; ¡no de rezar!”
  • LO QUE HACE EL DIABLO CON NUESTRAS PRUEBAS Y CRUCES. El diablo, disfrazado como un ángel de luz, puede alejemos de la oración asustándonos con este pensamiento: “Desde que te has dedicado a la oración mental, has tenido más cruces y pruebas! Al dejar la oración tendrás menos pruebas y menos cruces, tu vida será más llevadera y placentera.”
  • POR LA ORACIÓN DESCUIDAS A TU FAMILIA. Por último, el enemigo te acusará que estás descuidando a tu familia y te dirá: “Estás rezando tanto que descuidas a tu familia. Atiende a tu familia ya que esto agrada a Dios.”

Para concluir, San Alfonso, afirma que la oración es la clave para la salvación! El Catecismo de la Iglesia Católica citando a San Alfonso dice: “Quien reza, se salva; quien reza poco ponen en peligro su salvación eterna.” ¡La oración es el oxígeno del alma! El diablo, el enemigo de nuestra salvación, está profundamente consciente de esta realidad, y él, por lo tanto, hará todo de su parte mientras tengamos vida, para apartarnos de la oración. Si no logra nada con una de sus artimañas, intentará otra, y no descansará, por lo tanto, nos corresponde a todos los que estamos en combate espiritual estar vigilar y rechazar todas las tentaciones contra nuestra vida de oración. Recemos más y con mayor fervor! Que Nuestra Señora, quien aplastó la cabeza de la serpiente infernal nos ayude a ser católicos robustos y rechazar enérgicamente las tentaciones y a aferrarnos a Jesús, ancla de nuestra fe y de nuestra salvación!

El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS · Tagged: oracion

Ago 09 2016

MARIA, OBRA MAESTRA DE DIOS

 
Rosa Mística, Torre de David, Mística Ciudad de Dios, Arca de la Alianza, Jardín Cerrado, Reina de los ángeles, Reina de los Santos, Reina de los mártires, Reina de los confesores, Reina de las vírgenes, Virgen Inmaculada, Flor del Carmelo, Reina del Santísimo Rosario. Hija del Eterno Padre, Madre del Hijo de Dios, Esposa Mística del Espíritu Santo, Auxilio de los Cristianos, Medianera de todas las gracias, Co-redentora, nuestra vida, dulzura y esperanza, Puerta del Cielo, Llave al Corazón del Eterno Padre, la “Llena de Gracia” – estos gloriosos títulos han sido dados a María la gran Madre de Dios por los santos, los místicos y poetas y son expresiones que muestran la veneración, el amor, el respeto y la confianza que ellos tienen en la Santísima Virgen María; ella es  la Madre de Dios y Madre nuestra en el orden de la gracia.

En el presente ensayo abordaremos 3 sugerencias prácticas para renovar y reavivar la llama de amor a la Santísima Trinidad mediante una creciente devoción mariana.

  1. MARIA COGITA, MARIA INVOCA.   Esta es una de las invocaciones más queridas y citadas por los Oblatos de la Virgen María, legada a ellos, por su fundador, el Ven. Bruno Lanteri. “Maria Cogita, Maria Invoca”significa “Piensa en María, invoca a María.” Durante el transcurse del día, eleve su mente y piense en el amor, la bondad y el cuidado maternal de la Virgen Santa. ¡Invoque el dulce nombre de María¡ ya que después del sagrado nombre de Jesús, el nombre de María es el más excelso.
  2. IMITEMOS LAS VIRTUDES DE MARÍA. Todos estamos llamados al encuentro con Jesús, a la dicha eterna en el cielo, estamos llamados a ser santos, a ser extraordinarios santos! El conocimiento genera amor; el amor genera seguimiento; el seguimiento genera imitación; y la imatacion geneda la transformación… Esta es la dinámica! Si conocemos a Maria, la amamos como nuestra Reina y Madre; caminaremos en sus santos pasos e imitaremos sus santas virtudes, y el maravilloso resultado es la transformación. “Ya no más yo quien vive, sino que es Cristo quien vive en mi.” El que ama a María, ama a su Hijo Jesús más ardientemente. Hace años, los jóvenes en Estados Unidos llevaban puesta una pulsera con las siglas WWJD – “What would Jesús do” – Traducción “¿Qué haría Jesús?” Nuestro lema sería eso más algo más. Deberíamos decir “Qué harían Jesús y María?” Antes de tomar una decision o actuar, deberíamos hacernos esa pregunta: ¿Aprobarían Jesús y María de mis acciones? Si, sí, ¡adelante! Si, no, ¡no lo haga!
  3. EL AVEMARIA DE ORO. San Ignacio de Loyola nos ofrece numerosas formas de orar, una de ellas, es tomar una oración, como, el Padre Nuestro, el Credo, el Acto de Contrición o el Ave María, y rezarla pausadamente. Como el niño saborea su helado en un día de calor, así deberíamos gustar del recitar del AVE MARÍA. Mastique cada palabra, pronuncie cada palabra lentamente, saboree cada palabra de esta bella oración tan agradable a Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo; y la oración que más agrada a María!

Para concluir, no deje de pensar en María, téngala siempre presente en sus pensamientos, invoque su santo nombre, imite sus sublimes virtudes, rece pausadamente y saboree el Avemaria. Si lo hace, su devoción a la gran Madre de Dios aumentará, y crecerá en santidad. Su vida misma lo reflejará, y María llegara a nuestro auxilio ahora y especialmente a la hora de nuestra muerte.

El padre Ed Broom, OMV (Oblato de la Virgen María), conocido también como Padre Escobita, fue ordenado sacerdote por san Juan Pablo II en 1986. Es asistente del párroco en la Iglesia de San Pedro Chanel en Hawaiian Gardens (California). Allí imparte retiros, da los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola, organiza y dirige su propio programa de radio y televisión en Guadalupe Radio –Barriendo Conciencias.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS · Tagged: maría

Ago 05 2016

VIVE PLENAMENTE TU DEVOCION MARIANA


En su obra maestra, Tratado de la Verdadera Devoción, San Luis de Montfort expresa el papel exaltado, sublime y glorioso de la Virgen Maria, su función en el plan divino de la redención y su relación con Dios. Meditemos  estas palabras a medida que entramos en el importante tema de la salvación de nuestra alma y la salvación del mundo entero.

“María es la excelente obra maestra del Altísimo, quien se ha reservado para sí el conocimiento y posesión Ella. María es la Madre admirable del Hijo, quien tuvo a bien humillarla y ocultarla durante su vida, para fomentar su humildad, llamandola mujer (Jn 2, 4; 19, 26), como si se tratara de una extraña, aunque en su corazón la apreciaba y amaba más que a todos los ángeles y hombres. María es la fuente sellada, en la que sólo puede entrar el Espíritu Santo, cuya Esposa fiel es Ella. María es el santuario y tabernáculo de la Santísima Trinidad, donde Dios mora más magnífica y maravillosamente que en ningún otro lugar del universe, sin exceptuar los querubines y serafines; a ninguna creatura, por pura que sea, se le permite entrar allí sin privilegio especial.” (Tratado de la Verdadera Devoción #5)

En el presente ensayo abordaremos algunas sugerencias prácticas para cultivar una verdadera devocion a la Virgen Santísima para así amar más y mejor a Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. ¡María es el camino más rápido al corazón de Dios!

Consagracion a María
1.  CONSAGRACION A MARIA.  Primero, al comienzo de cada día, al escuchar el despertador, conságrese a María. Deje que sus primeros pensamientos y palabras sean las de su consagración a Jesús por medio de María. El santo Cura de Ars, san Juan María Vianey señala, que en la vida espiritual si empezamos el día bien, es muy probable que lo terminemos bien. Comience su día ofreciéndose al Sagrado Corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María. ¡Qué buen inicio en el camino al cielo! San Juan Damasceno, Padre de la Iglesia oriental afirma: “Servir a María y ser su cortesano es el honor más grande que podemos poseer.” Servir a la Reina del Cielo ya es reinar en lo alto, y vivir bajo sus órdenes es algo mayor que reinar.”

Escapulario2.  ESCAPULARIO DE LA VIRGEN DEL CARMEN. El signo exterior de nuestra consagración a María es el uso fiel del escapulario marrón de Nuestra Señora del Carme. El escapulario se lleva sobre los hombros y un cuadrado cae sobre el corazón, es muy simbólico de que estamos en el Inmaculado Corazón de María. La Iglesia otorga a los fieles bendiciones e indulgencias especiales simplemente por llevar puesto el Escapulario. Y por supuesto, besar el escapulario es una manifestación clara de nuestro gran amor a María, nuestra madre y del gran amor que María tiene por cada uno de nosotros. San Claudio de la Colombiere, el famosos jesuita y director espiritual de santa Margarita Maria, presenta un punto esclarecedor. Dice: “Por el hecho que numerosas expresiones de amor a la Virgen Purísima, cada expression tiene su propio encanto, y cada una ayudan a los fieles en distinto grado a llegar al cielo, lo digo sin vacilar por un instante que el Escapulario marron es el que más le agrada.” (Pasaje de Vestido de Gracia). Le recomendamos que compre y lea el librito Vestido de Gracia para llegar a un conocimiento más profundo del origen y próposito del Escapulario de Nuestra Señora del Carmen, y para conocer los innumerables milagros que se atribuyen al fiel uso de el escapulario.

3.  EL REZO DEL ANGELUS. El Angelus es una de las oraciones de más agrado y alegria a Nuestra Señora. Los Papas han rezado el Ángelus tradicionalmente los domingos al mediodía. Esta hermosa oración que consta de tres Avemarías es un breve resumen de los dos pilares de nuestra fe católica-cristiana: la Encarnación y la Pasión, muerte y Resurrección de Jesús, el “papel” de María junto a su Hijo en el plan de la redención. Quizás podrías formar el hábito de rezar el Angelus a tres horasa del día: a las 9 de la mañana, a las doce del medio día y a las seis.   Esto es un manera maravillosa de santificar las horas de la mañana, la tarde y la noche con la dulce fragrancia de la Rosa Mística – la Santísima Virgen María. Cuando reces, hazlo con humildad, podrías rezar con las palabras del “Doctor seráfico”, padre Franciscano, san Buenaventura, quien amo grandemente a María. “Confía tu causa a Ella, Madre de misericordia, y acércale con afán día tras día detalles singulares de devoción y veneración. Mantén con fidelidad tu cuerpo puro en imitación de Su pureza, y camina en sus huellas con humildad y ternura y afecto.”

4.  ACUDE A MARÍA SIN CESAR.   Los amigos se buscan, se llaman, se encuentra y dedican tiempo para fortalecer se amistad.   En verdad, el que ama a otra persona, añora compartir su vida, todo lo que tiene y todo lo que es con él. El primero y más grande mandamiento es “Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.” Después de Dios, debemos tener un gran amor por la Madre de Dios, Madre de la Iglesia y nuestra madre en el orden de la gracia. En español y en italiano hay un canto Mariano muy conocido: Santa María del Camino; ¿cuál es el significado? El canto consigna con detalle que María nos acompaña siempre en el peregrinar de cada día hasta que nos encontremos seguros en la patria celestial. De hecho, esta fue una de las advocaciones marianas predilectas de San Ignacio de Loyola, en italiano es “La Madonna de la Strada”. Que la Virgen Santísima nos acompañe y nos ampare de los peligros que atraviesa el cuerpo, la mente y el alma. El fundador de los Oblatos de la Virgen María lo expresó sucintamente en latín: “Maria cogita, Maria invoca – Piensa en María, invoca a María.”

5.  IMITEMOS A MARÍA. San Ignacio de Loyola, en el contexto de los Ejercicios Espirituales, nos dirige hace el núcleo y corazón de los Ejercicios: LA PERSONA DE CRISTO. San Ignacio insiste que al emprender esta importante tarea de contemplar la vida de Cristo, debemos pedir e implorar la siguiente gracia: Intimo conocimiento de Jesús para amarlo más y mejor seguirlo. Nunca hubo nadie sobre la faz de la tierra tan cerca de Jesús como María. Por lo tanto, si queremos estar más cerca de Él, conocerlo mejor, amarlo más, mejor seguirlo, acudamos a su amabilísima Madre. Tanto es así, que la Constitución dogmática “Lumen Gentium” Capítulo 8 destaca que la Virgen fue el primer discípulo de Jesús! Asimismo, nadie vivió vida más virtuosa, aparte de Jesús, que la Virgen pura. En la obra clásica, Tratado de la Verdadera Devoción, San Luis nos presenta las sublimes virtudes de María; virtudes que debemos imitar y emular en nuestra lucha diaria por la perfección. “La verdadera devoción a la Santísima Virgen es santa. Es decir, te lleva a evitar el pecado e imitar las virtudes de la Santísima Virgen, y en particular su humildad profunda, su fe viva, su obediencia ciega, su oración continua, su mortificación universal, su pureza divina, su caridad ardiente, su paciencia heroica, su dulzura angelical y su sabiduría divina. Estas son las diez principales virtudes de la santísima Virgen.” (número 108) Tendemos a imitar a aquel con quien nos asociamos; si caminamos con Jesús y María, sin lugar, caminamos en la santidad.

6.  CONOCER A MARÍA MEDIATE EL ESTUDIO.   Dice el adagio digno de ser acogido: “Sólo se ama lo que se conoce.”   Pues bien, es sentido común. Por lo tanto, cuanto más conocemos a la Virgen Santísima, más la amamos, mejor la seguimos, la imitamos e incluso acercamos otros a ella. El material que se ha escrito sobre la Madre de Dios es amplio: libros, artículos, folletos, documentos pontificios, documentos en forma de cartas y exhortaciones. En aras de la brevedad, nos gustaría sugerir la siguiente literatura clásica, que probablemente es la obra más conocida publicada sobre nuestra Señora: Las Glorias de María. Esta obra fue escrita por uno de los más grandes santos, Doctor de la Iglesia, fundador de los padres Redentoristas y más grande devoto de la Virgen Santísima, san Alfonso María Ligorio. Esta joya espiritual de hermosa sublimidad está escrito de forma sencilla y es un comentario sobre la oración mariana que rezamos a la conclusión del santo Rosario – El Salve Reina. San Alonso, insistía y reiteraba que nunca temamos acercarnos a María; María es toda misericordia, así nos lo enseña la Santa Iglesia en la oración: “Dios te salve, Reina y Madre, Madre de misericordia, vida y dulzura, y esperanza…” Este ha sido el pensar y el sentir de las incontables personas que han leído esta maravillosa obra, una corazón que se desborda de amor y devoción por María. Todo quien lee esta obra y la medita se percata que San Alfonso fue gran enamorado de la Santísima Virgen María. ¡Consiga esta obra maestro y léala, no se arrepentirá!

7.  EN LA TENTACIÓN, ACUDA A MARÍA. Nuestra vida en la tierra hasta el día de nuestra muerte es una batalla constante. Todos luchamos diario contra estos tres enemigos: el diablo, el mundo y la carne. El los capítulos iniciales del Libro del Génesis leemos “Pondré enemistad entre ti y la mujer… ella te aplastará la cabeza.” (Gen 3:15) El diablo, sabiendo esto, le tiene tanto odio. En en cuanto a nosotros, los hijos de María, el diablo está siempre al acecho, nos tienta, nos intenta seducir en su red, invoquemos el santo nombre de María! La batalla contra Satanás y sus secuaces es feroz, pero rezar una Avemaría con fervor, amor, devoción y fe es poderosísima porque jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a Su protección, implorado su auxilia haya sido abandonado por Ella (Acordaos de San Bernardo) Uno de los grandes predicadores en la historia de la Iglesia, el Doctor, San Antonio de Padua nos da estas palabras alentadoras pidiéndonos que invoquemos a María en las luchas y tentaciones: “Busca refugio en María que ella es ciudad de refugio. En los tiempos del Antiguo Testamento, estaba la ciudad de Hebrón, que Moises designó como la ciudad de refugio para quienes habían matado sin querer. Hoy Nuestro Señor nos a dado un refugio de misericordia. María es es ese refugio, aun para los que deliberadamente hacen el mal. María es refugio y fuerza para pecadores.”

8.  EN LAS CONTRARIEDADES: ACUDA A MARÍA. Un niño pequeño no teme correr a su Madre con todo tipo de dificultades. Nosotros también no deberíamos dudar en acudir a María, nuestra madre del cielo, con pasamos por tiempos difíciles. La cruz, las contrariedad y el sufrimiento son el pan de cada día y de forma singular para aquel que ha decidido seguir a Jesús y María. Un excelente ejemplo es la persona de San Juan Diego. Este hombre pobre, sencillo, humilde, con el corazón de un niño sufría por la inminente muerte de su tío anciano, Juan Bernardino. Muy temprano por la mañana, cuando se dirigía de prisa a la ciudad de México para buscar a un cura para que le diera la Extremaunción a su tío, se encuentra con Nuestra Señora de Guadalupe, quien con las palabras más consoladoras le dice que ella puede dar alivio a aquello que lo afligía, y en efecto, ella restauró la salud de su tio quien estaba muribundo. Nuestra Señora le dijo a San Juan Diego: “¡No temas! ¿No soy yo tu madre? Te tengo colocado en el hueco de mi manto y te sigo abrazando en cruce de mis brazos…” ¿Qué nos quiere decir nuestra Madre celestial? La Virgen Santísima quiere que busquemos refugio en su corazón, en su purísimo vientre para formarnos en otros Cristos. Por lo tanto, cuando estemos sobrecargados con los problemas de la vida, ¡busquemos refugio en los brazos y el corazón inmaculado de María! ¡Madre más amorosísima no encontraremos!

9.  CUADROS E IMÁGENES DE MARÍA. Cuando amamos a alguien, solemos tener una foto de él o ella, ya sea en la cartera, la casa, la oficina o en el teléfono móvil, y durante el transcurso del día, dirigimos nuestra mirada a la foto de nuestro amado(a) para hacerlo presente durante nuestro día. En los últimos 2000 años, a Dios gracias, se han pintado bellas obras artísticas de la santísima Virgen María quien es “la Obra Maestra de la creación.” Todos deberíamos tener en nuestros hogares, en la oficina, en nuestra cartera, bellas imágenes de nuestra Madre. Incontables son los cuadros de María, después de Jesús. Consiga uno, el que más le agrade y le inspire… Nuestra Señora de Fátima, Nuestra Señora de Guadalupe, Lourdes, Perpetuo Socorro, el Inmaculado Corazón de María, Nuestra Señora de los Dolores, la Sagrada Familia o Nuestra Señora, Auxilio de los cristianos. Les recomiendo altamente que entronen el Sagrado Corazón de Jesús y el Inmaculado Corazón de María en su casa. Esta práctica será fuente de bendiciones para su familia y todo quien llegue a su casa. Cuan cierto es el dicho: “Una imagen vale más de mil palabras” Dejemos que las palabras de San Maximiliano Kolbe, gran devoto y amante de la santísima Virgen María nos inspire: “Cuando nos consagramos a María, nos hacemos instrumentos en sus manos. Dejemos entonces que nos guíe, que ella proveerá por todas nuestras necesidades, de cuerpo y alma, y nos ayudará a superar las contrariedades y adversidades.”

10.  SEA DEFENSOR DE MARÍA. ¿Qué haría usted si alguien quiere empañar el buen nombre de su madre o su padre? ¡Qué descaro? No cabe la menor duda que saldría en defensa de la mujer que le dio la vida, ¿no es así? La Virgen Santísima es nuestra madre espiritual, y de igual manera debemos amarla y salir en su defensa. Nuestra Señora de Fátima reveló las tres principales ofensas a su Inmaculado Corazón. Las tres cosas que hieren su corazón son ataques contra los siguientes privilegios, primero, la Inmaculada Concepción, segundo, la Maternidad Divina, y, tres, ataques contra su virginidad perpetua. Otra ofensas contra la Santísima Virgen son ataques contra imágenes sacras y escandalizar a los pequeños a quienes tanto ama. Nos corresponde a todos que amamos a María salir en su defensa, ya sea con una palabra o con nuestro ejemplo de vida. Porque de hecho, el no hablar podría ser un pecado. Edmund Burke, filosofo irlandés, afirmo: “Para que el mal avance basta que los buenos no haga nada” A esto se le llama, pecado de omisión. Dejemos que las palabras del gran san Alfonso nos animen a amar y defender a nuestra Madre del cielo: “Muchos no dejarán que en una tierna devoción a María se arraigue en su corazón. Dichoso aquel que acoja esta gracia y la guarde. Esta devoción está en todo que son la herencia de nuestro Señor – de todos que lo alabarán eternamente en el cielo.”

Misa
11.  VAYA A MISA Y COMULGUE EN FIESTAS MARIANAS. Uno de los gestos que más agrada y llena de gozo a Nuestra Señora es cuando recibimos a su Hijo Jesús en la Santa Comunión, y de forma especial, en las fiestas marianas. La Virgen Santísima desea nuestra union con Jesús. Y indiscutiblemente, la unión más íntima que existe sobre la faz de la tierra es nuestra unión – de mente, cuerpo, corazón y alma- con la Eucaristía – el Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesús – en el momento de que comulgamos. Tomemos un paso más para mejorar nuestra recepción de tan sublime acramento, implore a nuestra Madre Santísima que le preste su Inmaculado Corazón para recibir el Sagrado Corazón de Jesús con un amor ardiente en la Santa Comunión. En efecto, el “sí” de María en la Anunciación fue en cierto sentido, su Primera Comunión, porque recibió a Jesús en lo más secreto de su cuerpo, alma, mente y corazón. Al comulgar, sigua este consejo de san Luis de Montfort dando gracias a Jesús con la Magnifican de nuestra Señora: “Mi alma glorifica al Señor, y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador…” (Lc 1:46-55)



12.CONFIE SU VIDA Y SU MUERTE A NUESTRA SEÑORA. Hay que recordar que la hora de la muerte es propiamente la hora más decisiva y difícil de todas porque en ella quedará fijo nuestro destino para la eternidad; nuestra salvación o condenación, ¡el cielo o el infierno! Si procuramos mantenernos cerca del Inmaculado corazón de María, si procuramos amarla con fervor, recurrir a ella y pensar en ella, la Reina del cielo será nuestro auxilio en este momento tan importante para que entreguemos nuestra alma en estado de gracia. De hecho, hace unos cuantos días me preparé doscientas veces para el momento de mi muerte, ¿cómo?, rezando el Santo Rosario y rezando 200 Avemarías en un solo día, pidiendo la gracia de una buena muerte: “Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra MUERTE, Amén.” Es cierto, si formamos el hábito del rezo del Rosario todos los días, o mejor aún, si rezamos más de un Rosario, Nuestra Señora estará a nuestro lado en el momento de la muerte para  Junto a nosotros estará María en el momento de la muerte y su intercesión nos resultara soberanamente necesario y eficaz. Ya que estamos necesitados de su asistencia en el momento final, porque si morimos en la gracia de Dios, seremos victoriosos y felices para siempre; pero si morimos en la enemistad de Dios, nuestro lugar estará junto a los réprobos. ¡No hay absolutamente nada más importante que morir en gracia de Dios! Que Nuestra Señora , la LLENA DE GRACIA, nos alcance la gracia singular de morir en gracia de Dios. ¡Amén!

Consagracion
13.  CONSAGRACIÓN TOTAL A LA VIRGEN SANTÍSIMA. Conságrese y entréguese enteramente a la Santísima Virgen, para ser enteramente de Jesús por medio de Ella, y renueve su consagración cada año. Hay diferentes métodos para hacer la Consagración a Nuestra Madre, uno es la formula de consagración total a Jesús por María de San Luis de Montfort: Tratado de la Verdadera Devoción, otra, la consagración a la Inmaculada de san Maximiliano Kolbe, otra, la del P. Michael Gaitley, 33 días hacia un glorioso amanecer. Una vez hecha esta donación y entrega total y definitiva, en donde ya no nos pertenecemos a nosotros mismos y somos propiedad de Nuestra Señora, los frutos son verdaderamente magníficos e increíbles, todo. Sin embargo, cabe resaltar un fruto de esta donación y fuente de gran consolación consiste en el conocimiento y la certeza que María está siempre presente, nos acompaña y no nos dejará ni por un instante e intercede por nosotros. Esta realidad nos llena de una paz interior de mente, corazón y alma y nos libera toda inquietud. ¿Por qué? Porque pertenecemos a la Virgen Santísima, Madre de Dios, y Madre singular, quien cuidará de nosotros, y nos conducirá tanto a nosotros como a nuestros seres queridos cada instante de nuestras vidas. San Vicente de Palette nos anima con estas ardientes palabras de amor: “Los que tienen gran devoción a María no sólo se salvarán, sino que por su intercesión, se convertirán en grandes santos. Además, crecerán en santidad día a día.

14. SI CAE EN PECADO – CORRA A LOS BRAZOS DE MARÍA. La culpa de Adán nos es imputada;por el pecado original, todos somos pecadores desde la concepción hasta el momento de la muerte; todos excepto la Santísima Virgen María. Es mas, hay una fuerte tendencia en nosotros que se inclina a pecar, y pecamos. Cuando, de algún modo cometemos una falta, no nos desalentemos o desesperemos, sino con gran confianza y amor sometámonos a la misericordia infinita de Dios. Corramos y los brazos de María y de manera especial acudamos a Jesús que está presente en el sacramento de la reconciliación. Cuando un niño se cae, se lastima o se raspa la rodilla y se cae en el lodo, la madre corre a su auxilio, lo levanta, lo abraza y le besa la herida. Es exactamente lo que hace la Virgen Santísima cuando nos caemos en la vida espiritual; Nuestra Señora, como buena madre, corre a nuestro auxilio y nos ayuda a salir del fango y nos alienta para que regresemos a Jesús por medio de una buena confesión. “En su afán de mostrarnos Su misericordia, Dios nos ha dado a su Hijo como Abogado. Y para lograr que nuestra confianza sea aún más fuerte, ÉL nos ha dado otra Abogada, quien obtiene a través de sus oraciones lo que ella pide. Id con María, y versa la salvación (San Alfonso María de Ligorio

15.  PONER AL BEBÉ EL NOMBRE DE MARÍA. Los padres cristianos tienen el deber y la responsabilidad de darle a sus hijos un nombre cristiano y nunca se equivocan si le dan el nombre de “María” ya que, al darle el nombre de María a su hija, tendrá una protección singular de Ella cuyo nombre es el más poderoso y santo entre todos los nombres después de Jesús. ¡Los demonios huirán de él al oír pronunciar el dulce nombre de María! En la Divina Comedia, Dante nos presenta a un diablo listo para arrastrar a un alma en el infierno donde ya ha preparado el lugar de tortura para esa alma, pero, Jesús interviene y frustra el plan del diablo por la simple razón que esa alma había invocado el santo nombre de María. ¿Cuáles son algunos nombres de María? Mary, María, Lourdes, Fátima, Guadalupe, Ana María, María Teresa, Concepción, Rosa María, Rosario… y muchos más. Entre los muchos gratos momentos para mi como sacerdote está el momento en que bautizo a una niño con el nombre de MARIA. Otro buen hábito que deberíamos fomentar es rezar las Divinas Alabanzas diciendo: “Bendita sea la gran Madre de Dios María santísima, Bendita sea su santa e inmaculada concepción. Bendita sea su gloriosa asunción. Bendito sea el NOMBRE DE MARÍA, Virgen y Madre..”   Es mas, la fiesta litúrgica para el Santo Nombre de María es el 12 de Septiembre, cuatro días después de la Fiesta del nacimiento de la Virgen María, el 8 de septiembre.


16.  APOSTOL MARIANO. Es inevitable, si realmente amas a alguien, quieres que todos lo amen y lo conozcan. ¡Proclamemos desde los tejados a Jesús y María! Veamos algunos ejemplos de los santos y sigamos sus pistas, san Maximiliano Kolbe, apóstol de la Virgen Inmaculada, sembraba devoción a María repartiendo Medallas Milagrosas de la Inmaculada, las cuales llamaba, sus balas espirituales, porque era sus armas espirituales para vencer y acabar con el enemigo y su todo su ejercito. Aquí le ofrezco una idea, sea práctico, compre unas quinientas medallas milagrosas; estudie la imágenes grabada en ambos lados y su riqueza simbólica y regálelas y repártalas a las personas con quien se encuentre. Dios le abrirá muchas puertas, solo es necesario que tengamos nuestros ojos espirituales abiertos. Una de las conversiones más famosas fue la de Alphonse Ratisbonne, un judío, quien para apaciguar a un amigo católico, acepto llevar puesta la Medalla Milagrosa, hasta que un día Nuestra Señora se le apareció en Roma y más tarde se convirtió al catolicismo, y, más tarde su hermano igual se convirtió. Alphonso se hizo sacerdote y fundó la Congregación de Nuestra Señora de Sion, el objetivo era lograr una mejor comprensión entre los judíos y los cristianos y convertir judíos; y todo este fruto fue por la presencia de María mediadora y la Medalla Milagrosa. Alcemos la mirada y fijemos nuestro corazón en María, la Madre de Dios y que nos inspiren la obra maestra de la poesia del Doctor melífluo (“El Doctor boca de miel) de la Iglesia, san Bernardo de Claraval, de cuya corazon surgió la poesia Mariana más hermosa: “Stella Maris” – María, Estrella del Mar. “En los peligros, en las angustias, en las dudas, piensa en María, invoca a María. No se aparte María de t boca, no se aparte de tu corazón; y para conseguir los sufragios de su intercesión, no te desvíes de los ejemplos de su virtud.” (Mira a la Estrella, invoca a María – San Bernardo)

17.  JACULATORIAS A LA VIRGEN MARÍA. Forme el hábito de dirigir a la Virgen Purísima oraciones breves encendidas de amor y de cariño. Los grandes santos aconsejaban con tanto levantar con frecuencia el corazón a Dios con estas pequeñas aspiraciones y ardientes suspiros del alma. Estas jaculatorias son “dardos ardientes de amor que penetran el cielo”. El elenco es extensivo pero nombremos solo algunas del tesoro de la tradición cristiana: “¡Dulce Corazón de María, sed mi salvación!”, “Ave María purísima, sin pecado concebida.” “¡Oh María sin pecado original concebida, rogad por nosotros que recurrimos a Vos!” “María, virgen Madre de Dios, ruega por mí” Estas oraciones llenas de amor encenderán nuestro amor a Jesús y María. San Buenaventura nos alienta con este glorioso ornamento a María “Dichosos los que se abandonan en los brazos de Nuestra Señora. Sus nombres están escritos en el Libro de la Vida.¨

18.  PROMOVER LAS PROCESIONES MARIANAS EUCARISTICAS. En Lourdes, Francia, ocurren unas curaciones extraordinarias en el lugar en donde Nuestra Señora se le apareció a santa Bernardita Soubirous 18 veces en 1858. Durante estas apariciones, Nuestra Señora le pidió a Bernardita que escarbara con sus manos en la tierra, y de ahí brotó una fuente de agua milagrosa de Lourdes y no han parado de brotar. Enfermos de cuerpo y alma han hallado la salud por su fe e ilimitada confianza en la intercesión material de María. Pero lo más grande es que al anochecer, los peregrinos se reúnen para la procesión mariana con antorchas, es en la procesión Eucarística que suceden las curaciones más maravillosas.   Allí, en la presencia de Jesús Eucaristía, Jesús el Hijo de María, muchos han sido sanados. Es lógico: ¡Jesús es el Médico divino! Uno de los títulos de la Virgen María es “Salud de los enfermos”. Por lo tanto, promovamos y participemos en procesiones en honor a la Virgen Santísima y su Hijo en el Santísmo Sacramento.   Las curaciones y los milagros del cuerpo se harán, pero más que nada, habrán curaciones del alma. Los Papas también han sido fervorosos amantes de la Santísima Virgen María. Escuchemos las palabras del Papa, san Leon Magno, sobre el poder de María: “El diablo busca siempre a quién devorar, tal como María siempre busca a quien ayudar.”

19.  MAYO MES DE MARIA Y OCTUBRE MES DEL ROSARIO. Madre y Maestra de los pueblos, la Iglesia ha dedicado los meses de mayo y octubre a María para honrarla. Mayo es el mes de María; Octubre es el mes del santo Rosario. En mayo, esforcémonos con gestos concretos mostrarle a cuanto la amamos y ofrezcámosle oraciones, sacrificios, pequeños acciones de caridad o quizás leyendo un libro sobre María. En octubre, todos los días recemos el santo Rosario, cantemos cantos marianos; reunamos a nuestra familia alrededor de los pies de María rezando el santo Rosario. “María acude a nuestro auxilio, y es la más presta de todos los santos en venir. En el momento en que la invocamos, acepta nuestra súplica y nos brinda su auxilio.” (San Alfonso Ligorio)

20.  EL ROSARIO, EL ROSARIO, EL ROSARIO. La oración que más agrada a Nuestra Madre Santísima es el santo Rosario. Hagamos el Rosario nuestra oración predilecta, recémoslo todos los días y recémoslo constantemente con amor, atención y devoción y Nuestra Señora dejará caer una lluvia de gracias y bendiciones. Cada Avemaría que rezamos con devoción es un beso que mandamos al cielo. Nuestra Señora de Fátima se le apareció a los niños en Fátima – Jacinta, Francisco y Lucia – y en cada aparición insistió en el rezo del santo Rosario. Por cierto, en Fátima, la Virgen María dio su nombre como nuestra Señora del Rosario. El Papa, san Juan Pablo II en su documento “La beata Virgen María y el Rosario” exhorta al mundo a que rece el Rosario por dos intenciones: por la familia y por la paz del mundo. El sacerdote del Rosario, el P. Patrick Peyton, nos anima con estas palabras: “La familia que reza unida, permanece unida, y, un mundo en oración es un mundo en paz”.

Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

Jun 29 2016

EJERCICIOS ESPIRITUALES PARA NIÑOS: EXAMEN DEL DÍA

EL EXAMEN DEL DÍA. El Examen es una práctica espiritual muy provechosa para aumentar nuestro conocimiento  de la prescencia amorosa de Dios en nuestra vida. Dios es amor; Dios está en todas partes; Dios todo lo ve, incluso las cosas más pequeñas. Dios conoce nuestros pensamientos; conoce nuestro corazón y nuestras intenciones. San Pablo, citando al poeta griego, expresó esta magnifica realidad de Dios siempre presente: “En Él vivimos, y nos movemos, y somos.»

El Examen del Día, se puede hacer a cualquier hora, en cualquier lugar y toma solo unos cuantos minutos; de cinco a diez. Trata de ser fiel a esta práctica, no dejes que un solo día pase sin examinar tu día. Lo ideal es fijar la hora y el lugar en donde lo harás, por ejemplo, podrías hacerlo diez minutos antes de la hora de cenar o diez minutos antes de irte a la cama. San Ignacio, el santo a quien Dios le entregó los Ejercicios Espirituales, enseñaba y tanto insistía en que no dejaramos de hacer nuestro examen todos los días.

El que es fiel a su Examen, reconoce la presencia de Dios en su vida, reconoce Su voz y su voluntad a través de los acontecimientos; su oído se afina y está más atento a las inspiraciones de Dios, escuchará Su voz cuando otros le hablan, y verá a Dios en los acontecimientos de cada día, los lugares en donde se encuentra, en las alegrías, las tristezas, en los éxitos y los fracasos.

LA CLAVE PARA ALCANZAR LA SANTIDAD. Para tener una profunda y creciente amistad con Dios y crecer en santidad de vida, es preciso reconocer el inmenso amor de Dios tiene por mi y por ti y reconocer Su presencia en nuestra vida. Es importante ser dócil a Él – ¿Qué significa ser dócil? – es estar atento a su voz y seguir su voluntad, es decir “SÍ” a Dios. La Virgen Purísima, en todo momento de su vida, estuvo profundamente consciente de la presencia de Dios en todo lugar y toda circunstancia. Su “sí” fue una entrega plena a Dios, y Dios hizo su morada en ella; que maravilloso ejemplo para nosotros.

San Ignacio sugiere cinco pasos para hacer el EXAMEN DEL DÍA; oración que nos ayuda a descubrir la presencia de Dios en la vida diaria, el amor de Dios, la unión con Dios; Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. Descubrimos la presencia de Jesús, nuestro Hermano y mejor Amigo en nuestra vida. Una cualidad de los buenos amigos es que se buscan, comparten ideas, comparten el actividades, se ayudan y se interesan por saber qué tal les ha ido. Jesús debería ser nuestro mejor amigo, debemos pensar en Él y conocer lo que Jesús pide de nosotros. El Examen del Día fortalecerá nuestra amistad con Jesús.

Ahora bien, veamos cuales son los cinco pasos para hacer el Examen del Día. Si hacemos nuestro examen cada día por unos minutos, nos aprenderemos los pasos y será más fácil ponerlos en práctica.

EL “EXAMEN” IGNACIANO

  1. GRACIAS. El Salmista nos exhorta a dar gracias a Dios: “Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia.” Empiece su oración dando gracias a Dios; Le es muy agradable a Dios que le demos gracias, porque al no darle gracias lo herimos. Las escrituras nos relatan que una vez, Jesús sanó a diez leprosos solo uno regresó a darle gracias. Jesús inclinando su rostro dijo: ¿No fueron diez los limpiados? Nosotros queremos ser ese “uno” que hace un gesto de agradecimiento. ¿De qué podemos dar gracias a Dios? ¡Podemos dar gracias por todo! De hecho, todo lo bueno que tenemos son don gratuito de la bondad y beneplácito de nuestro Padre amoroso. Podrías dar gracias a Dios por tu familia – tus padres, tus hermanos y hermanas; Agradece a Dios por tus amistades, por tu salud, por la alegría en tu corazón. Pero sobre todo, dale gracias a Dios por tu FE; por tu fe en Dios. Hay muchos que no creen en Dios, pero tu sí crees porque Dios te ha dado ese don. Hoy, en este preciso momento, Dios te ha dado muchas cosas que te alegran el corazón. ¡Detente y pasa el tiempo que quieras, dando gracias a Dios!
  1. PETICIÓN: PIDE A DIOS LA GRACIA DE VERTE A TI MISMO Y VER TU DÍA CON LOS OJOS DE DIOS. El próximo paso es pedir y rogar a Dios, como un mendigo, la capacidad de ver las cosas que han pasado en el último día, desde que hiciste tu último Examen. Pida a Dios la gracia de examinar tu día con Jesús y María a tu lado.
  1. PENA/ CONTRICION. Es muy importante ser sincero y honesto con Dios; Dios es tu Padre! Él es como el padre de la parábola del Hijo Prodigo, y, Jesús es tu mejor amigo. Mientras que rebobinas la película de tu vida, reconoce tus fallas; tal vez le has faltado el respeto a tu mamá o papá, tal vez te has peleado con tu hermano o tu hermana, tal vez has sido desobediente, tal vez has sido perezoso y nos has cumplido con tus deberes, trabajos o tareas. O quizás te quejas cuando te piden que saques la basura. Tal vez has dicho una mentirita o más de una; tal vez eres poco paciente y corajudo. Si haces este Examen Ignaciano, te empezarás a dar cuanto cómo está tu corazón, te darás cuenta de las palabras que usas, de tus acciones e incluso tus intenciones.
  1. Después de que con humildad hemos reconocido nuestras fallas, nos dirigmos a Nuestro Padre Dios y a Jesús nuestro mejor amigo, y, con toda sencillez y humildad pedimos perdón de corazón. ¡Perdóname! Te pido perdón por mi egoísmo, por mi impaciencia y desobediencia. Estoy arrepentido de todo corazón y más porque sé que he pecado contra con mis actos, mis pensamientos y decisiones. Confío, Dios mío, en tu infinito amor y misericordia. JESÚS, EN TI CONFÍO.
  1. RENOVACIÓN Y COMPROMISO PARA EL SEGUIENTE DÍA… El último paso en este Examen es renovar, proponerse y comprometerse a cambiar y mejorar. Repasamos una vez más lo que hemos hecho: 1) Hemos dado gracias a Dios por las incontables bendiciones, hemos pedido a Dios la gracia de ver nuestra vida con la perspectiva divina, hemos examinado nuestras palabras, actos, intenciones y fallas, ahora sí que estás listo para comenzar de nuevo. Conócete mejor cada día para no regresar a los mismos malos hábitos. Comienza de nuevo, afirma tu amor a Dios, ten buena voluntad, buenos propósitos, y, lucha con todo tu corazón de estar consciente de la presencia amorosa de Dios en tu vida, y responde a Su llamada. Y di con el salmista: “El Señor es mi pastor, nada me falta.” (Salmo 23)
Facebooktwitterredditpinterestlinkedinmail

Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

  • « Previous Page
  • 1
  • …
  • 38
  • 39
  • 40
  • 41
  • 42
  • …
  • 104
  • Next Page »

Entradas recientes

  • EL CONCLAVE
  • EL VICARIO DE CRISTO
  • EL ARTE DEL DEBATE
  • DOMINGO DE LA DIVINA MISERICORDIA
  • LA MUERTE DE UN PAPA
  • PESCADOR DE HOMBRES
  • DIRECCION ESPIRITUAL
  • 5 FINES DE LA MISA
  • 5 M´s
  • MODALES EN MISA

© Copyright 2016 Oblates of the Virgin Mary · All Rights Reserved