Padre Edward Broom, OMV (P.Escobita)

Espiritualidad Católica Ignaciana y Mariana

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May 20 2020

LA PRESENTACION DEL NINO JESUS | EJERCICIOS ESPIRITUALES | 20 MAYO 2020

GRACIAS A PEDIR: Conocer íntimamente a Jesús, para amarlo más ardientemente y seguirlo.  

QUINTO DÍA:  LA PRESENTACIÓN…   Lc. 2, 25-32

1. PIDA LA MISMA GRACIA QUE EN LA CONTEMPLACIÓN PRECEDENTE:  Conocimiento íntimo de Jesús el Hijo de Dios hecho Hombre para amarlo más ardientemente y seguirle.

2. CAMINO AL TEMPLO.  José y María le invitan a que los acompañe hoy al templo.  ¿Por qué al templo?  Porque se han cumplido los días de purificación, y conforme a la ley de Moisés, ahora llevan a Jesús a Jerusalén para presentarlo al Señor.  ¡Qué motivo de alegría!  En el camino, hable con la Sagrada Familia, hable con cada uno de ellos, ellos anhelan entablar un profundo diálogo con usted, pero esperan que usted tome la iniciativa.  Estos ejercicios deben movernos a una íntima conversación con Jesús, María y señor san José.

3. EL TEMPLO. Con los ojos de la imaginación, vea la majestuosidad e inmensidad del templo; este templo fue construido por el Rey Salomón, el Hijo de David.  Pero aquí hay un Templo más grande y majestuoso – Cristo es el verdadero Templo de Dios.  Por la gracia de Dios recibida en el Bautismo, los cristianos somos también templos de Dios y al recibir la santa Comunión somos verdaderos sagrarios de la Santísima Trinidad.

4. SIMEÓN:  LA VIRTUD DE LA PACIENCIA.   Simeón, el santo anciano, había vivido toda su vida con vistas al momento en que el Mesías esperado visitaría el templo de Jerusalén.  Simeón quien ya estaba al final de su vida, supo esperar con paciencia las promesas de Dios.  Ahora, pregúntese usted – ¿Tengo paciencia con Dios?  ¿Tengo paciencia con mi prójimo?  ¿Tengo paciencia conmigo mismo? Cuando rece, hágase estas preguntas y pida a Jesús la gracia de a conocer el motivo de su impaciencia para corregirla.  ¡Ruegue al Señor que le conceda esta gracia

5. SIMEÓN ALABA A DIOS Y TOMA AL NIÑO EN SUS BRAZOS.  Simeón tomando al Niño Jesús en sus brazos y alaba a Dios por su misericordia, y predice el futuro sufrimiento para el Mesías:  En efecto, sera él “signo de contradicción”, destinado a encontrar una dura oposición.  Simeón también une al sufrimiento de Cristo la visión del alma de María atravesada por la espada, asociando de este modo a la Madre el destino doloroso de su Hijo.  Simeón dice:  ‟Una espada de dolor atravesará tu corazón para que los pensamientos de muchos sean descubiertos.”

6. DESCUBRIR EL VALOR DEL SUFRIMIENTO. El sufrimiento humano tiene valor sólo cuando lo unimos a los padecimientos de Cristo, nos asemeja a Él que libremente abrazo la cruz por amor. Una de dos, el sufrimiento nos hará una persona mejor o nos deja sólo un amargo rencor, todo depende en si lo abrazamos libremente por amor.  Veamos el ejemplo de María la Madre de Jesús quien se unió a Jesús tanto en las alegrías como en el dolor.

7. “AHORA SEÑOR DESPIDE A TU SIERVO EN PAZ… porque han visto mis ojos tu salvación, la cual has preparado en presencia de todos los pueblos; Luz para revelación a los gentiles”. (Lc 2, 29-32)  Relacionemos esto a nuestra propia vida: ¡Qué privilegio tenemos tu y yo de poder contemplar los ojos de Cristo en la Santa Misa en la consagración cuando el sacerdote eleva la Hostia consagrada  y qué privilegió poder recibir la Santa Comunión de manos del sacedote y que privilegio poder contemplar a Jesús en la Custodia!

8. TENEMOS MAYOR PRIVILEGIO QUE SIMEÓN.  Simeón tomó al Niño en sus brazos y contempló su santa faz – ¡en efecto un gran privilegio!  Pero Dios nos ha concedido a nosotros mayor don.  Tú y yo podemos recibir a Jesús, si estamos en estado de gracia, todos los días en la Santa Comunión.  ¡Nuestro corazón debería rebosar de alegría, gratitud y alabanza por la bondad de Dios!  ¡Dios es infinitamente bueno!

9. ANA.  La profetisa Ana, quien vivía en el templo, al presenciar aquellos acontecimientos comienza a hablar del Niño; ella anuncia a todos que sus ojos han visto al Salvador.  Esta santa mujer quién había enviudado joven  ahora se dedicaba a la oración y penitencia en espera del Señor. ¡Qué gran ejemplo y modelo para la gente mayor!

10. MARÍA. Preste atención y contemple toda la escena.  Hay mucho material para meditar, esta meditación nos pide que consideremos en espíritu de oración los siguientes puntos.

  • UNION: La importancia de la unión familiar.
  • PEREGRINOS: Somos un pueblo peregrino en camino a la patria celestial – el cielo.
  • PACIENCIA: Esperemos la volutad de Dios con paciencia; no desfallescamos nunca en la oración.
  • CONTEMPLEMOS: Contemplemos a Jesús al meditar la Palabra de Dios y en el Sacramento de la Eucaristía.
  • DOLOR: El valor del sufrimiento si lo unimos al sufrimiento de Jesús.
  • EVANGELIZAR: Como Ana, anunciemos la Buena Nueva de Dios.
  • ANHELAR EL CIELO: Morir santamente como Simeón.  Su anhelo fue ver a Jesús en esta vida para contemplarlo y estar con Él en el cielo por toda la eternidad!

11. COLOQUIO.  Concluya esta meditación con un triple coloquio.  También hable con los santos que ellos ¡se deleitan en interceder por nosotros ante el trono de Dios!  ¡Pídales su poderoza intercesión!  Hable también con san Simeón y pida que le alcanze la gracia de perseverar en la oración, de esperar con paciencia .  Hable con santa Ana, ¡pida su intercesión para que usted con gozo proclame la Buena Nueva de Jesucristo su Señor y Salvador!  Por último, hable con la santísima Virgen, pida que le ayude a aceptar las cruces en su vida y que le enseñe a unirlas al sufrimiento de su Hijo en la cruz. Hágalo con fe y confianza en la voluntad y bondad de Dios. 

 

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Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

May 19 2020

LA NATIVIDAD | EJERCICIOS ESPIRITUALES | 19 DE MAYO 2020

GRACIAS A PEDIR: Conocer íntimamente a Jesús, para amarlo más ardientemente y seguirlo.

CUARTO DÍA:  LA NATIVIDAD…   Lc. 2, 6-12

1. PIDA LA MISMA GRACIA QUE EN LA CONTEMPLACIÓN PRECEDENTE. Conocer íntimamente a Jesús – quien por nosotros nació en Belén – para amarlo más ardientemente y seguirlo.  Jesús nació por mi – ¡Cuán grande es su amor por mí!

2. LA NAVIDAD. Ruegue a Dios con humildad que le conceda la gracia de comprender el verdadero significado de la Navidad, no del punto de vista comercial sino desde la óptica de Dios.

3. CONTEMPLACIÓN.  Pida a Dios la gracia de estar verdaderamente presente en este momento más sublime, más hermoso, más humilde y lleno de gracias; el momento de la natividad del Hijo de Dios y de María. Profundice sobre el misterio de la Navidad y el significado espiritual que se esconde detrás de él.

4. LA JORNADA.  Acompañe a la Sagrada Familia – al niño Jesús en el vientre de María, a María y san José – que van de camino de Nazaret a Belén.  Use su imaginación, imagine lo difícil que fue el viaje, imagine las contrariedades que tuvo que pasar la Sagrada Familia por amor a nosotros.  Esta jornada no fue un paseo o día de campo, María se encontraba en su último mes de embarazo e hizo el viaje sentada sobre una albarda de asno.  El señor san José, su castísimo esposo y amable protector, iba de pie cuidando de ella.  El camino fue difícil  ¡no habían autopistas modernas, la superficie desnivelada estaba llena de hoyos y baches, la Sagrada Familia curzo muchos valles.  ¿Y el clima?  Hicieron muchos días de viaje, imagine y sienta el frío que golpeó el rostro de María y de san José.  Quizás hubieron días en qué lloviznó u otros en donde callo lluvia y granizo.  Pero a pesar del clima inclemente, no hubo queja alguna que saliera de los labios de María o José.  María con recogimiento estaba perfectamente consciente de Jesús a quien llevaba en su vientre; ¡ella llevaba a Dios en su vientre!  ¡Oh Señora mía, oh Madre mía, enséñame a adorar a Jesús en el Santísimo Sacramento!

5. AL LLEGAR A LA POSADA.  Llegan a Belén de noche y san José se dirige al primer mesón para buscar hospedaje, pero en este mesón sólo encuentra frialdad y rechazo.  San José se dirige a otra posada y luego a otra, y a otra, y a otra; todos cierran la puerta al ver a María y José.  ¡San José y María encuentra un rechazo total!  En las Sagradas Escrituras leemos: ‟No había lugar para ellos en el mesón.”  El arzobispo Fulton J. Sheen afirma acertadamente: ‟El Creador del universo no encontró lugar en toda su creación para nacer.”  María y José no consienten coraje, resentimiento o amargura; Conformaron su voluntad a la voluntad del Padre Celestial.  ¡El plan divino fue otro, Dios les señal otro camino!

6. EL ESTABLO EN BELÉN. San José ve a la distancia un lugar para refugiarse – es una gruta; una gruta que sirve de establo para guardar los animales del frio.  San José se señala la cueva a la santísma Virgen María; el rostro de Maria muestra un tierno gesto de aceptación (así lo presenta el P. Patrick Peyton en la película sobre el Rosario).  Después de haber hecho el largo camino a Belén, san José dirige el asno suavemente hacia la gruta; ¡sobre el asno va sentada la santísma Madre de Dios!  Vea el amor y la ternura con el que el glorioso patriarca san José trata a su amada esposa.  ¡Ahora el llamado es para usted!  Usted está allí.  Ayude a san José en éste glorioso momento.  Pero no ayude de forma pasiva sino de forma activa, ¡acomídase!

7. EL ESTABLO. ¡Ahora vea el establo!  ¿Cómo es?  ¿Cómo huele?  ¿Qué ruido escucha?  En esta noche más santa, todo está oscuro.  Una corriente fría corta el aire.  Y ése olor, ¿qué es?  ¡es el olor de animales!  ¡No es una dulzura aromática!  En esta noche santa, ¡se albergaban animales en la cueva!  ¡Reflexione en esto!  ¿Qué animales ve?…  Ahora fíjese en el clima.  ¿Hace frío?  ¡Claro que sí!  El frío es extremo e implacable.  Pero no se detenga ahí.  Usted puede empezar a buscar leña para dar algo de calor a José y María y al Niño que ella lleva en su vientre.  Jesús quiere que usted le de calor  le sirva, le ame, tanto a Él como a su purísima Madre y a san José.  ¡Qué agradecidos están Jesús, María y José de su humilde servicio!

8. ¡HA LLEGADO EL MOMENTO! ¡En esta noche santa, de profunda soledad y en el silencio de la noche JESÚS nace de la Virgen María!  ¡Vea el momento en que la Luz del mundo nace!  Vea cómo la Madre amada envuelve al más hermoso e inocente de los niños en pañales y lo acuesta en el pesebre.  Contémplelo con los ojos, pero más que nada, con los ojos de su corazón.  !Deje que sus ojos se recreen en tan hermoso Niño!  ¡Contemple al Niño Jesús!  ¡Ámelo con cada fibra de su ser!  ¡Viva el momento!  Deje que su corazón se desborde de amor y gratitude. ¡No se detenga!  ¡Porque fue por USTED que el Niño Jesús nace!

9. UN MOMENTO INOLVIDABLE LLENO DE AMOR. Ahora contemple al Niño en brazos de María su madre.  Ella lo ve con ojos de inmenso amor y ternura.  Contemple los ojos humildísimos de María, siempre fijos en la grandeza de Dios.  ¡Qué hermosa eres, mi amada, que hermosa eres!  Pero en ese momento, ella se detiene.  Ella alza la mirada y lo ve a usted y le invita a que tome al Niño en sus brazos; ella le anima con amor y confianza.  Viva intensamente esta escena… la Virgen santísima pone en sus brazos a su Hijo, el Creador del universo, al Salvador del mundo, a su Tesoro más grande, a su Hijo – el NIÑO JESÚS.  Tome a Jesús en sus brazos y abráselo a su corazón, ¡adorélo!  No se detenga, bese su pequeña frente.  Hable tiernamente con Él, comparta con Él todo lo que guarda en su corazón.  ¡No se detenga, ábrale el corazón de par en par y cuéntele todo!  Este es el momento de sondear profundamente en la oración en la más tierna contemplación… 

10. LOS PASTORES.  Ahora vea con los ojos de su imaginación a los humildes pastores que acaban de llegar.  Un coro de ángeles les ha anunciado el nacimiento del Niño Jesús.  Vea cómo con mucho acatamiento y reverencia se acercan y entran al establo.  Los pastores no se sienten extraños, se sienten acogidos en este lugar.  Son los más pobres de los pobres, son a quien Dios más ama.  Vea el gozo que radía de sus rostros.  Vea lo que ofrecen al Niño y a sus padres; les ofrecen un poco de leche o un poco de queso.  Le ofrecen a la Virgen Madre tejido de lana para acobijar al Niño en esta noche fría.  Contemple esta hermosa escena.  Entre en la escena y reflexione para cosechar abundantes frutos.   

11. COLOQUIO. Acabe esta meditación con un triple coloquio.  Hable con san José, hable con María y concluya hablando con su Salvador y Redentor, Jesús.  ¡Jesús nació por amor a tí!

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May 19 2020

LA NAVIDAD | EJERCICIOS ESPIRITUALES |19 MAYO 2020

GRACIAS A PEDIR: Conocer íntimamente a Jesús, para amarlo más ardientemente y seguirlo.

CUARTO DÍA:  LA NATIVIDAD…   Lc. 2, 6-12

1. PIDA LA MISMA GRACIA QUE EN LA CONTEMPLACIÓN PRECEDENTE. Conocer íntimamente a Jesús – quien por nosotros nació en Belén – para amarlo más ardientemente y seguirlo.  Jesús nació por mi – ¡Cuán grande es su amor por mí!

2. LA NAVIDAD. Ruegue a Dios con humildad que le conceda la gracia de comprender el verdadero significado de la Navidad, no del punto de vista comercial sino desde la óptica de Dios.

3. CONTEMPLACIÓN.  Pida a Dios la gracia de estar verdaderamente presente en este momento más sublime, más hermoso, más humilde y lleno de gracias; el momento de la natividad del Hijo de Dios y de María. Profundice sobre el misterio de la Navidad y el significado espiritual que se esconde detrás de él.

4. LA JORNADA.  Acompañe a la Sagrada Familia – al niño Jesús en el vientre de María, a María y san José – que van de camino de Nazaret a Belén.  Use su imaginación, imagine lo difícil que fue el viaje, imagine las contrariedades que tuvo que pasar la Sagrada Familia por amor a nosotros.  Esta jornada no fue un paseo o día de campo, María se encontraba en su último mes de embarazo e hizo el viaje sentada sobre una albarda de asno.  El señor san José, su castísimo esposo y amable protector, iba de pie cuidando de ella.  El camino fue difícil  ¡no habían autopistas modernas, la superficie desnivelada estaba llena de hoyos y baches, la Sagrada Familia curzo muchos valles.  ¿Y el clima?  Hicieron muchos días de viaje, imagine y sienta el frío que golpeó el rostro de María y de san José.  Quizás hubieron días en qué lloviznó u otros en donde callo lluvia y granizo.  Pero a pesar del clima inclemente, no hubo queja alguna que saliera de los labios de María o José.  María con recogimiento estaba perfectamente consciente de Jesús a quien llevaba en su vientre; ¡ella llevaba a Dios en su vientre!  ¡Oh Señora mía, oh Madre mía, enséñame a adorar a Jesús en el Santísimo Sacramento!

5. AL LLEGAR A LA POSADA.  Llegan a Belén de noche y san José se dirige al primer mesón para buscar hospedaje, pero en este mesón sólo encuentra frialdad y rechazo.  San José se dirige a otra posada y luego a otra, y a otra, y a otra; todos cierran la puerta al ver a María y José.  ¡San José y María encuentra un rechazo total!  En las Sagradas Escrituras leemos: ‟No había lugar para ellos en el mesón.”  El arzobispo Fulton J. Sheen afirma acertadamente: ‟El Creador del universo no encontró lugar en toda su creación para nacer.”  María y José no consienten coraje, resentimiento o amargura; Conformaron su voluntad a la voluntad del Padre Celestial.  ¡El plan divino fue otro, Dios les señal otro camino!

6. EL ESTABLO EN BELÉN. San José ve a la distancia un lugar para refugiarse – es una gruta; una gruta que sirve de establo para guardar los animales del frio.  San José se señala la cueva a la santísma Virgen María; el rostro de Maria muestra un tierno gesto de aceptación (así lo presenta el P. Patrick Peyton en la película sobre el Rosario).  Después de haber hecho el largo camino a Belén, san José dirige el asno suavemente hacia la gruta; ¡sobre el asno va sentada la santísma Madre de Dios!  Vea el amor y la ternura con el que el glorioso patriarca san José trata a su amada esposa.  ¡Ahora el llamado es para usted!  Usted está allí.  Ayude a san José en éste glorioso momento.  Pero no ayude de forma pasiva sino de forma activa, ¡acomídase!

7. EL ESTABLO. ¡Ahora vea el establo!  ¿Cómo es?  ¿Cómo huele?  ¿Qué ruido escucha?  En esta noche más santa, todo está oscuro.  Una corriente fría corta el aire.  Y ése olor, ¿qué es?  ¡es el olor de animales!  ¡No es una dulzura aromática!  En esta noche santa, ¡se albergaban animales en la cueva!  ¡Reflexione en esto!  ¿Qué animales ve?…  Ahora fíjese en el clima.  ¿Hace frío?  ¡Claro que sí!  El frío es extremo e implacable.  Pero no se detenga ahí.  Usted puede empezar a buscar leña para dar algo de calor a José y María y al Niño que ella lleva en su vientre.  Jesús quiere que usted le de calor  le sirva, le ame, tanto a Él como a su purísima Madre y a san José.  ¡Qué agradecidos están Jesús, María y José de su humilde servicio!

8. ¡HA LLEGADO EL MOMENTO! ¡En esta noche santa, de profunda soledad y en el silencio de la noche JESÚS nace de la Virgen María!  ¡Vea el momento en que la Luz del mundo nace!  Vea cómo la Madre amada envuelve al más hermoso e inocente de los niños en pañales y lo acuesta en el pesebre.  Contémplelo con los ojos, pero más que nada, con los ojos de su corazón.  !Deje que sus ojos se recreen en tan hermoso Niño!  ¡Contemple al Niño Jesús!  ¡Ámelo con cada fibra de su ser!  ¡Viva el momento!  Deje que su corazón se desborde de amor y gratitude. ¡No se detenga!  ¡Porque fue por USTED que el Niño Jesús nace!

9. UN MOMENTO INOLVIDABLE LLENO DE AMOR. Ahora contemple al Niño en brazos de María su madre.  Ella lo ve con ojos de inmenso amor y ternura.  Contemple los ojos humildísimos de María, siempre fijos en la grandeza de Dios.  ¡Qué hermosa eres, mi amada, que hermosa eres!  Pero en ese momento, ella se detiene.  Ella alza la mirada y lo ve a usted y le invita a que tome al Niño en sus brazos; ella le anima con amor y confianza.  Viva intensamente esta escena… la Virgen santísima pone en sus brazos a su Hijo, el Creador del universo, al Salvador del mundo, a su Tesoro más grande, a su Hijo – el NIÑO JESÚS.  Tome a Jesús en sus brazos y abráselo a su corazón, ¡adorélo!  No se detenga, bese su pequeña frente.  Hable tiernamente con Él, comparta con Él todo lo que guarda en su corazón.  ¡No se detenga, ábrale el corazón de par en par y cuéntele todo!  Este es el momento de sondear profundamente en la oración en la más tierna contemplación… 

10. LOS PASTORES.  Ahora vea con los ojos de su imaginación a los humildes pastores que acaban de llegar.  Un coro de ángeles les ha anunciado el nacimiento del Niño Jesús.  Vea cómo con mucho acatamiento y reverencia se acercan y entran al establo.  Los pastores no se sienten extraños, se sienten acogidos en este lugar.  Son los más pobres de los pobres, son a quien Dios más ama.  Vea el gozo que radía de sus rostros.  Vea lo que ofrecen al Niño y a sus padres; les ofrecen un poco de leche o un poco de queso.  Le ofrecen a la Virgen Madre tejido de lana para acobijar al Niño en esta noche fría.  Contemple esta hermosa escena.  Entre en la escena y reflexione para cosechar abundantes frutos.   

11. COLOQUIO. Acabe esta meditación con un triple coloquio.  Hable con san José, hable con María y concluya hablando con su Salvador y Redentor, Jesús.  ¡Jesús nació por amor a tí!

 

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May 18 2020

LA VISITACION | EJERCICIOS ESPIRITUALES | 18 MAYO 2020

GRACIAS A PEDIR: Conocer íntimamente a Jesús, para amarlo más ardientemente y seguirlo.

TERCER DÍA:  LA VISITACIÓN…  Lc. 1, 39-45

1. GRACIAS A PEDIR (LA MISMA GRACIA QUE EN LA ANUNCIACIÓN)… Conocer íntimamente a Jesús, quién se hizo hombre por nosotros para amarlo más ardientemente y seguirlo.

2. MARÍA, SAGRARIO VIVIENTE.  La segunda Persona de la Santísima Trinidad, se encarnó y habitó en el seno purísimo de María por nueve meses, María es Templo y Sagrario de la Beatísima Trinidad, es el “admirable ostensorio del Cuerpo de Cristo” (San Juan Pablo II).  La santísima Virgen María es nuestro modelo de oración, de adoración Eucarística y de quienes hacen su Hora Santa.

3. CONTEMPLATIVOS EN ACCIÓN.  La oración y la vida apostólica no son contrapuestas, sino absolutamente complementarias.  Es más, una depende de la otra; la primera es la oración, luego viene la acción, como resultado de la oración.  Quien tiene una auténtica vida de oración tiene una fecunda vida apostólica porque la oración lleva necesariamente a la acción, y esta acción sera más fecunda, mientras más intense sea la vida de oración.  En la oración escuchamos la voz de Dios, escuchamos el Llamado del Rey.  De allí que el Papa san Juan Pablo II nos haya indicado que “para conocer a Cristo en el pobre, hay que encontrarlo y conocerlo en primer lugar en la oración.”  María escuchó la Palabra de Dios y con prontitud actuó.  La vida activa (vida apostólica) surge de la contemplación.  Al decir la “vida activa” nos referimos a nuestro trato con otros.  ¡Pidamos a la Virgen santísima la gracia de ser verdaderos contemplativos en acción, de añorar y anhelar la salvación de las almas!

4. DOCILIDAD: QUE NO EXISTA DEMORA ALGUNA.  María partió sin demora, con prisa y se pone en camino hacia la montaña para llegar de prisa a una ciudad de Judá y dirigirse a la casa de Zacarías e Isabel.  ¡Qué gesto elocuente de entrega y servicio!  María, plenamente dócil a la acción del Espíritu Santo sale “de prisa”.  Reflexionemos, en particular, sobre esta imagen que encontramos en el Evangelio – María sale “de prisa”.  Dice el Santo Padre Emerito Benedicto XVI en su Homilía del 15 de agosto de 2011, “Me parece importante subrayar la expresión “de prisa”:  las cosas de Dios merecen prisa; más aun las únicas cosas del mundo que merecen prisa son precisamente las de Dios, que tienen la verdadera urgencia para nuestra vida.” Pregunta: ¿Es usted dócil a las inspiraciones del Espíritu Santo, o frustra el plan de Dios al no actuar con prontitud a las inspiraciones que recibe? 

5. HAGAMOS EL RECORRIDO CON MARÍA/CAMINEMOS CON ELLA. Contemple esta escena, más bien entre en la contemplación, acompañe a la santísima Virgen quién se dirige hacia Ain Karim, a la casa de su prima Isabel.  Isabel, una mujer de edad avanzada, está en su sexto mes de embarazo.  ¡No hay nada imposible para Dios!  María va a caminar una distancia de 80 kilómetros, ¡qué distancia!  ¡Acompáñela!

6. CONTÉMPLELA Y HABLE CON ELLA.  Haga todo el recorrido con la Madre de Dios y madre vuestra, ¿por qué no?  María sale presurosa para hacer la voluntad de Dios y cumplir su misión de caridad.  Con razón la beata Madre Teresa de Calcuta dijo que María fue la ‟primera Misionera de la Caridad.”  No demore más, camine lado a lado con ella, hable con ella, comparta con ella todo, comparta con ella lo que ha sido su propio caminar por la vida.  Comparta con ella las veces que usted se ha tropezado, las veces que se ha desviado del camino, las veces que se ha quedado atorado, las veces que ha caído en el lodo, las veces que se ha accidentado.  No tenga miedo.  María puede ayudarle a reparar el daño y encaminarlo de nuevo hacia el camino que conduce al Dios.  Al caminar con ella, adore a Jesús a quien ella lleva en su purísimo vientre. ¡María es Sagrario Viviente!

7. ¡EL SALUDO! Al saludo gozoso de María, la criatura en el viente de Isabel salta de alegría; este bebé es Juan el bautista.  Isabel, movida por el Espíritu Santo, alaba a María y alaba al fruto de su vientre con estas palabras: ‟Bendita eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre.  ¿Quién soy yo que la madre de mi Señor venga a visitarme?  Porque, apenas llegó a mis oídos la voz de tu saludo, saltó de gozo el niño en mi seno.” 

8. PASAJE PRO-VIDA. En verdad, éste es uno de los pasajes claves pro-vida en toda la Biblia.  Dos mujeres que esperan un hijo se regocijan ante la maravilla que Dios obra en ellas.  Hay dos milagros distintos.  El primer milagro: Isabel, una mujer de edad muy avanzada, está en su sexto mes de embarazo – ¡esto fue un gran milagro!  El segundo milagro, ¡una joven virgen (la Santísima Virgen María) concibe por el poder y la gracia del Espíritu Santo!  Alegrémonos y alabemos la vida del Hijo de Dios y el Hijo de María.  Alabemos y demos gracias a Dios por el don de nuestra propia vida y vivámosla plenamente buscando siempre vivir una vida santa.

9. LA MAGNIFICAT. Que brote de nuestros labios la misma alabanza que brotó de los labios y el corazón de María – la Magnificat.   Recémosla en este momento.  

Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava.  (Lc 1, 46-55)

Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mi: su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación.
Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a loshambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacios.

 Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia – como lo había prometido a nuestros padres – en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. 

 

En efecto, la Magnificat de María es la forma más sublime de vivir Principio y Fundamento.  ¡Alabemos a Dios con nuestros labios y corazón y como lo manifestó  María!

10. LA VISITA DE MARÍA A ISABEL – ¿CÓMO FUE EL TIEMPO QUE PASARON JUNTAS?   Hubieron muchos momentos preciados en estos meses que María pasó con su prima.  En esta meditación, le toca a usted compartirlos con la santísima Vigen María.  Ayúdele a preparar los alimentos, a hacer la limpieza, a lavar, a coser, a tejer, a barrer, acompáñela al pozo por agua.  María hizo todos estos quehaceres mientras estaba en la casa de Isabel.  Y no sólo eso, sino que María platicaba con Isabel y le daba ánimo a Zacarías quién no podía hablar.  Y por supuesto, María rezaba con ellos pidiendo la bendición de Dios sobre ellos y sus hijos.  Trabaje con María; contemple sus movimientos y sus acciones, escuche sus palabras y adore a Jesús a quien ella lleva en su vientre.

11. COLOQUIO.  Hable con María…  Pídale que le dé su bendición, y que le alcance la gracia de amarla más cada día, tanto a ella y como a su Hijo.  Pídale que bendiga a cada miembro de su familia, háblele de todo lo que le preocupa y pida el bienestar de sus seres queridos y la salvación eterna de sus almas.  ¡Permita que María le consuele y le anime!

 

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May 17 2020

SAN JUAN PABLO II, JUAN PABLO EL GRANDE

De todas las gracias que Dios me ha otorgado, considero y agradezco a Dios infinitamente por el don del sacerdocio – a esta gracia y merced añado humildemente la experiencia única, inmerecida de haber sido ordenado por uno de los hombres más grandes en la historia del mundo – EL PAPA SAN JUAN PABLO II – ¡¡¡JUAN PABLO EL GRANDE !!!

¡Así es! Tuve el privilegio único de estar bajo las santas manos del obispo de Roma, el futuro santo, Juan Pablo II, el 25 de mayo de 1986, fue un domingo, el día de la Solemnidad de la Santísima Trinidad, día que damos culto y adoración al Padre, Hijo y Espíritu Santo.

En verdad, puedo decir que mi cabeza es santa y mi es cabello también, Juan Pablo II me bendijo y recibí el Orden Sacerdotal por la imposición de sus manos. Cuán grandiosas son las bendiciones de Dios. ¡Soy una viva reliquia de tercera clase!

El día después de mi ordenación, después de mi cantamisa (en realidad mi primera misa fue después de la ordenación con el Papa San Juan Pablo II con los muchos otros obispos y sacerdotes recién ordenados), tuve el privilegio de conocer a Santa Madre Teresa de Calcuta. ¡Este día le di mi bendición sacerdotal y ella besó mis manos consagradas!

No habían transcurrido más de 24 horas, y yo había recibido el gran privilegio de conocer a las dos figuras más santas del siglo pasado: San Juan Pablo II y Santa Madre Teresa de Calcuta. Fue el momento más inolvidable de mi vida: ¡conocer a los dos misioneros más grandes del siglo XX! 

Agradeciendo estas bendiciones y por motivo que celebramos el 18 de mayo de 2020, el centenario del nacimiento del Papa San Juan Pablo II, cuyo nombre era Karol Wojtyla, quiero rendir homenaje y dar gracias a Dios por este gran hombre de Dios destacando diez de entre tantos logros que heredo a la Iglesia y al mundo.

1. TOTUS TUUS! Este gran pontífice comenzó su pontificado consagrando su servicio a la Iglesia con un emblema o lema muy especial: TOTUS TUUS: ¡Totalmente tuyo (María)! Esto viene del gran santo mariano, Louis de Montfort, quien nos dejó un camino seguro y poderoso de consagración a Jesús a través de María, la verdadera devoción a María, así como su clásico literario sobre el rosario, El Secreto del Rosario. Juan Pablo II quiso recibir la protección única de la Virgen María a quien amaba como Madre, guía, Estrella del Mar y Estrella de la Nueva Evangelización. En sus numerosas visitas papales viajando por todo el mundo, a menudo buscaba el Santuario Mariano y rendía homenaje y honor a María en ese lugar sagrado. No nos sorprende que el lugar más visitado en su pontificado fuera de Italia fue México, donde visitó el santuario de Nuestra Señora de Guadalupe varias veces.

2. CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA. Nunca hemos vivido en un tiempo, un lugar o una época con tanta información y a la vez un mundo con tanta confusión, una verdadera masa de confusión, y tristemente esta confusión existe ampliamente en la iglesia en particular en cuanta concierne a la verdad doctrinal y moral. Por este motivo el mayor logro literario de Juan Pablo II fue la promulgación del Catecismo de la Iglesia Católica. El Catecismo, obra maestra literaria, explica claramente los cuatro pilares de la verdad católica: 1. Dogma: quién es Dios y sus atributos; 2. Moralidad: los Diez Mandamientos; 3) Los Sacramentos: canales de gracia y santificación; 4. Oración: Unión y Amistad en conversación con Dios.

3. JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD. Fue Juan Pablo II quien convocó reuniones con los jóvenes de todo el mundo. Incluso, una de estas reuniones tuvo lugar en Denver, Colorado en 1993, la primera JMJ (Jornada Mundial de la Juventud) celebrada en Norteamérica o en una nación de habla inglesa. La Agencia Católica de Noticias (CNA) informó: «A medida que las inscripciones comenzaron a llegar, el numero llego a 150,000», dijo el arzobispo Dennis Schnurr de Cincinnati, quien se desempeñó como director nacional de la JMJ de Denver. “El registro final fue de 500,000. Sabemos que asistieron muchos más sin registrarse, especialmente para la Misa final. Acudieron 750,000 personas ”. ¿Quién hubiera creído que un anciano vestido de blanco podría atraer a miles y miles de jóvenes, ser visto por millones y generar un entusiasmo que sacudió los cimientos de la cultura moderna materialista, hedonista y sensual en la que la humanidad moderna es tan? profundamente inmerso

4. CANONIZACIONES Y BEATIFICACIONES. Todos estamos llamados a ser santos. Lumen Gentium, Capítulo V, exhorta a todos con «El llamado universal a la santidad». Todos estamos llamados a la santidad, estamos llamados a ser santos. Jesús nos dice claramente: «Sé santo como es santo tu Padre celestial». (Mt. 5:48)  Veamos diez de las  personas/figuras más reconocidas que fueron canonizadas durante los 26 años del pontificado de Juan Pablo II.
Aquí está la lista:
1. San Pío de Pietrelcina, conocido como Padre Pio.
2. San Josemaría Escrivá de Balaguer, fundador del Movimiento Opus Dei.
3. Santa Faustina Kowalska, la primera santa canonizada en el nuevo Milenio, conocida como la Secretaria de la Divina Misericordia.
4. Santa Teresa Benedicta de la Cruz: judía convertida al catolicismo, monja carmelita y mártir en Auschwitz (como Kolbe).
5. Santa Katharine Drexel, una santa estadounidense que dio sus riquezas para encontrar su tesoro en Dios.
6. San Maximiliano Kolbe: el mártir de la caridad, que eligió las dos coronas que María le ofreció.
7. Santa Gianna Beretta Molla, que sacrificó su vida por su bebé en su vientre;
8. San Juan Diego, el Apóstol de Nuestra Señora de Guadalupe;
9. Beata Jacinta Marto: la pequena alma víctima.
10. Beato Francisco Marto: El pequeño místico. (Jacinta y Francisco fueron dos de los tres visionarios de Nuestra Señora de Fátima.

El Papa Francisco los canonizó como Santos el 13 de mayo de 2017). Juan Pablo II beatificó y canonizó a religiosos, sacerdotes y fieles laicos, y exhortó a todos a buscar la verdadera santidad de la vida.

5. TEOLOGÍA DEL CUERPO. Sin duda, uno de los mayores logros de Juan Pablo II en teología moral fue su enseñanza sobre la Teología del Cuerpo. En 1968, el Papa San Pablo VI publicó una de las encíclicas más explosivas y controvertidas en la historia de la Iglesia, Humanae Vitae. En este documento, Pablo VI declaró inequívocamente que la sexualidad humana entre esposo y esposa debe estar abierta a la posibilidad de la vida, a la procreación, y que cualquier forma de anticoncepción artificial es intrínsecamente desordenada. La enseñanza magisterial de Juan Pablo II desarrolló con mayor detalle esta verdadera comprensión de la sexualidad humana. O la persona humana es vista como un objeto para ser explotada, utilizada y descartada o la persona humana es respetada, amada y apreciada por su dignidad innata y su destino eterno. El gran pontífice dio una serie de enseñanzas sobre estas grandes verdades durante su audiencia papal del miércoles, solo para ser interrumpido por el intento de asesinato el 13 de mayo de 1981.

6. MISERICORDIA Y PERDÓN. Si le preguntásemos a alguien sobre uno de los recuerdos más vivos de Juan Pablo II, lo más probable es que muchos recuerden el día y el momento en que le dispararon y casi muere el 13 de mayo de 1981. Que por cierto, fue el mismo mes y la misma fecha de la primera aparición de Nuestra Señora de Fátima en 1917. Después de su recuperación en ese mismo año de 1981, Juan Pablo II fue y vistó en la celda de la prisión a un hombre, lo abrazó y lo perdonó, era el mismo hombre que había intentado matarlo. Esto resultaría ser uno de los íconos o imágenes de misericordia y perdón más poderosos en la historia del mundo. Las palabras de Jesús mientras colgaba en la cruz resuenan ampliamente en este gesto de Juan Pablo II: «Padre, perdónalos, porque no saben lo que están haciendo». (Lucas 23:34)7.

7. SANTA FAUSTINA Y LA DIVINA MISERICORDIA. Como hemos mencionado anteriormente, la primera canonización de Juan Pablo II en el nuevo Milenio fue la de su compatriota de Polonia, que vivió cuando Kolbe vivía, fue la canonización de Santa María Faustina Kowalska. Se dice que ese día, el 30 de abril de 2000, fue el día más feliz en la vida de Juan Pablo II. ¿La razón?  La canonización de Santa Faustina e la institución oficial la Solemnidad de la Divina Misericordia: el segundo domingo después de Pascua, ¡la corona y culminación de la Octava de Pascua! Juan Pablo II sintió que una de sus principales misiones era promover grandemente y con urgencia que debemos ser misericordioso y confiar en la infinita misericordia de Dios.

8. MISIÓN DEL REDIMIDOR. El Papa San Juan Pablo II y Santa Madre Teresa fueron vistos los dos más grandes misioneros del mundo en el siglo XX. Nunca en la historia del mundo hubo un hombre tan visible o un Papa que haya viajado más o dado tantas vueltas alrededor del mundo, visitando tantos lugares diversos y ofreciendo tantas charlas diferentes. En su encíclica, «Misión del Redentor» (1990), Juan Pablo II declaró con gran claridad y urgencia que todos los bautizados tienen un llamado y vocación para ser misioneros: llevar la Palabra y la Persona de Jesús al mundo entero. Las últimas palabras de Jesús fueron un mandato misionero: “Id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a obedecer todo lo que te he mandado. Y estoy con ustedes siempre, hasta el fin del mundo. (Mt 28: 19-20)

9. SU ENCICLICAS Y ENSEÑANZAS. Nadie puede dudar de que Juan Pablo II fue uno de los mejores maestros en la historia del catolicismo, incluso en la historia del mundo. Un día será declarado Doctor de la Iglesia, por la profundidad espiritual de su Magisterio. En aras de la brevedad, enumeraremos solo diez de sus escritos más reconocidos esperando poder hondear en el inmenso océano de su sublime enseñanza:

  • El Redentor del Hombre (1979): Su primera Encíclica Papal que preparó el escenario para su pontificado fuertemente Cristológico. Cristo, Redentor del hombre, se revela al hombre a sí mismo, tanto su dignidad como su destino eterno.
  • Rico en Misericordia (1980) —Encíclica. Resalto el atributo más grande en el Corazón de Jesús: Su misericordia. Esto lo explica por medio de la Parábola del Hijo Pródigo (Lucas 15: 11-32), que podríamos llamarse, «¡La Parábola del Padre Misericordioso!»
  • El Evangelio de la Vida (1995) —Encíclica. Condena el peor mal moral de nuestros días: el aborto, el asesinato del niño inocente en el viente. Las dos normas ignacianas entran en juego: «El Evangelio de la vida contra la cultura de la muerte».
  • Fe y razón (1998) —Encíclica. Dios nos llama a una fe profunda en Su presencia, pero también debemos usar la razón como un medio para llegar a Dios. La fe y la razon no se contradicen, sino que se complementan. Santo Tomás de Aquino debe ser nuestro modelo.
  • Reconciliación y Penitencia (1984): Exhortación Apostólica. La pérdida del sentido del pecado y el llamado a regresar a Dios a través de la práctica de la Confesión Sacramental.
  • Familiaris Consortio (1981) —Exhortación Apostólica. El valor de la familia como Iglesia Doméstica y como célula básica de la sociedad. El futuro del mundo depende del futuro de la familia.
  • Sobre la dignidad y la vocación de la mujer (1988) —Carta Apostólica. La mujer tiene gran dignidad y valor, y desempeña un papel fundamental en el mundo y en la evangelización.
  • El valor salvífico del sufrimiento (1984) —Carta Apostólica. El sufrimiento humano tiene un valor infinito, especialmente cuando está unido al sufrimiento de Jesús. Debemos aprender a santificar nuestro propio sufrimiento.
  • La Iglesia y la Eucaristía (2003) —Encíclica. La fuente y la cumbre de la vida cristiano-católica es la Eucaristía: el Cuerpo, Sangre, Alma y la Divinidad de Jesús. Esto se encuentra en el contexto del Cuerpo Místico de Cristo, la Iglesia.
  • María: Madre del Redentor (1987) —Encíclica. Cristo es el único Redentor, pero María colabora en la obra de la Redención; ella colaboró ​​con él, especialmente cuando estaba parada al pie de la cruz.

10. SU MUERTE: UN MODELO PARA TODOS NOSOTROS COMO PEREGRINOS TERRESTRES. Al final de su vida, la salud del Papa San Juan Pablo II disminuyó y se deterioró, en particular los últimos cinco años de su vida. Sin embargo, Juan Pablo enseñó al mundo una lección invaluable: ¡en el envejecimiento y el sufrir debemos ofrecer nuestras limitaciones humanas ya que tiene un valor infinito a los ojos de Dios! Jesús es nuestro modelo supremo en todos los tiempos y lugares, pero especialmente cuando sufrió y murió en la cruz por la salvación de toda la humanidad. El Papa San Juan Pablo II murió el 2 de abril de 2005, por la tarde, alrededor de las 9:00 p.m. Fue el primer sábado del mes, dedicado a Nuestra Señora de Fátima, pero lo más importante, fue la Vigilia de la Solemnidad del Domingo de la Divina Misericordia. Murió en los brazos de María y fue recibido en el Abrazo Misericordioso del Padre Eterno y el Hogar Eterno del Cielo.

Oración al Espíritu Santo
Ed Broom, OMV (P. Escobita)

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, inflama mi corazón con tu amor divino.  Ilumina mi entendimiento para ser capaz de conocer la Verdad, vivir la Verdad, y estar dispuesto a dar la vida por la Verdad.

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, en los momentos más oscuros y más difíciles de mi vida; confórtame y consuélame. Tu, que eres el Dulce Huésped del alma, ilumina mi entendimiento para que conozca tu presencia viva y constante, y conozca que nunca estoy solo, que Tu, mi Amigo fiel, ¡estás siempre conmigo!

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, Maestro Interior y enséñame a orar; no sé como rezar. Intercede por mi – te imploro – con gemidos inefables para que yo pueda clamar: “¡Abba, Padre!”

Ven Espíritu Santo, ¡ven!, en momentos de duda y confusión, se mi luz y mi consejero.  Ayúdame a tomar decisiones, no buscando mí voluntad, sino siguiendo Tu Santa Voluntad.

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, en momentos de debilidad y fortifícame.  Espíritu Santo, fuerza y el valor de los mártires, alcánzame la fuerza para resistir el pecado, para resistir mi naturaleza caída y para resistir todo aquello que te desagrade.

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, concédeme el don del amor filial a Ti y una caridad sincera para con mi prójimo, especialmente para ellos con quien vivo y trato día tras día.  ¡Enciende mi corazón con el fuego de tu amor!

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, lléname de Ti y santifícame. Tu que eres el Santificador, haz que yo tenga vivos deseos de ser santo.  “Sean santos como es santo tu Padre celestial.” Haz que alcance vivir una vida santa para ser merecedor de tu promesa de la vida eterna.

Ven, Espíritu Santo, ¡ven!, produce en mí, un santo y reverencial temor que me motive a evitar todo lo que te desagrade; a evitar a toda persona, lugar, cosa o circunstancia que pueda dañar mi amistad contigo.

Ven, O Virgen Purísima, ¡ven!  Esposa Mística del Espíritu Santo, Templo y Sagrario del Espíritu Santo, Tu que viviste una unión íntima y perfecta con el Espíritu Santo, intercede por mi, para que yo conozca y ame cada día más al Espíritu Santo hasta el día en que esté contigo para siempre en el Cielo, alabando al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo por los siglos de los siglos.  Amén.

 

 

 

 

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Written by Fr. Ed Broom, OMV · Categorized: ARTICULOS

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